Un anillo comercial y rascacielos rodearán la estación de Chamartín
LA FUTURA terminal estará integrada en el Centro de Negocios de Nuevo Norte, con las vías soterradas HABRÁ TERRAZAS escalonadas con vistas a la ciudad y se unirán andenes y vestíbulo con un espacio diáfano
La futura estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor ya tiene definida su nueva cara. Contará con un anillo comercial abierto, con entradas por todo su perímetro y quedará integrada entre la multitud de rascacielos que se construirán en la zona, el centro de negocios Nuevo Norte. Las vías se soterrarán.
Así lo explicaron ayer los integrantes del equipo UNStudio, b720 Arquitectura y Esteyco, los ganadores para transformar la estación, que presentaron el
proyecto Chamartín, ecosistema abierto. El acto contó con la participación de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, y la presidenta de Adif, María Luisa Domínguez.
El gestor público de infraestructuras ya explicó que la propuesta respeta la memoria histórica de Chamartín y recupera las bóvedas como elemento singular e identificador de la estación. También habrá balcones urbanos (terrazas escalonadas), que se integrarán en el entorno.
La elección de este proyecto permite desarrollar los trabajos a la vez que otras obras en la estación, como es el caso de la ampliación del vestíbulo sur, que ya está en marcha. Además, -posibilitará que no se pare la actividad. «Junto al anillo externo permeable habrá un anillo interno que permitirá orientarse. Habrá entradas en los cuatro laterales para acceder a esta estructura que permitirá ver los trenes, la playa (de vías) y los andenes que activan parte del zócalo», relató el arquitecto Fermín
Vázquez. Esto último hace referencia a la creación de un espacio diáfano con el que los usuarios podrán acceder al vestíbulo desde los andenes. En la estación estarán también integradas las oficinas de Adif, en una de las torres que pasará a formar parte del skyline de la ciudad de Madrid.
Por otro lado, la transformación proyectará más vías destinadas a alta velocidad, que pasarán de 6 a 12, «una vez concluya la construcción de cuatro nuevas vías pasantes y la conversión a ancho estándar de otras dos», indicó Adif. Asimismo, la estación ofrecerá más capacidad para trenes y un tráfico más fluido. «Chamartín podría gestionar entre un 25% y un 30% más de viajeros diarios de Cercanías, hasta 900 trenes diarios», afirmó el equipo.
En cuanto al edificio de viajeros, estará compuesto de tres zonas: una de embarque para alta velocidad con doble altura, una para la red de Cercanías y otra con un vestíbulo común longitudinal que será la principal vía de movimiento de los usuarios. Hasta final de año se abordarán la ampliación del vestíbulo principal hacia el norte, el montaje de aparatos de vía y señalización entre las vías 1 y 6 y el acondicionamiento de los andenes 1,2 y 3, así como el refuerzo de estructuras en el ámbito de la plaza urbana.
Todas las actuaciones representan una inversión de 326 millones de euros y en su desarrollo están involucrados más de 1.000 profesionales.
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