Moncloa admite que la coalición dependerá de que Sumar quede en tercer lugar en las generales
Presidencial reconocen que los resultados de Díaz en los comicios serán clave y piensan que se disputará la posición con Vox en cambio, dice que la alianza será imposible si no se integran en Sumar
ten más de diez diputados–, el sistema es prácticamente proporcional: el porcentaje de votos obtenido se traduce con bastante fidelidad al número de escaños adjudicados, siempre que se supere el 3% de los votos. Pero eso no ocurre en las circunscripciones medianas y, especialmente, en las pequeñas, donde la combinación del sistema de reparto D’Hondt con la escasez de actas a repartir provoca que el sistema electoral tenga efectos mayoritarios y prime la concentración del voto en las fuerzas políticas más grandes.
«Son dos ligas, dos divisiones», explican fuentes cercanas al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que insisten en que quienes están arriba son los socialistas y los populares y que dejan la otra disputa a Vox y a Díaz, aún sin saber si Podemos se integrará en Sumar. El escenario ideal para el bloque progresista, según las mismas fuentes, sería que se unieran, para que no se deseche ni un voto en unas elecciones que estarán reñidas. De hecho, la preocupación que hasta ahora ha invadido a Ferraz y Moncloa ha sido la lentitud con la que la vicepresidenta segunda se tomó su proceso de escucha. La guerra, ahora, está en que vayan unidos, o al menos eso trasladan.
Entretanto, Unidas Podemos sigue acusando al PSOE de estar torpedeando que los morados y Sumar se den al fin el aprentón de manos. Además de afirmar que UP ha resultado «incómodo como socio de Gobierno» para el PSOE, Ione Belarra también afirmó ayer en RNE que a Díaz los socialistas «le dirán que puede tirar sola, que no le hace falta Podemos». Es en este punto en el que la también ministra de Derechos Sociales mandó un mensaje a la líder de Sumar: que aclare si su intención es presentarse a las elecciones generales como la candidata de la «unidad» junto a Podemos, ya que, aseguró, los «proyectos personalistas» no responden «bien» a lo que quieren los ciudadanos.. ●