Las subidas de tipos precarizan aún más a 380.000 hogares endeudados
Las fuertes subidas de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) desde julio de 2022 arrastrarán a cientos de miles de hogares a la vulnerabilidad financiera. Así lo refleja el Banco de España en su Informe de Estabilidad Financiera, publicado ayer, donde reconoce que las turbulencias bancarias son «un nuevo foco de incertidumbre» para las entidades y rebaja drásticamente el impacto previsto de las medidas de alivio hipotecario del Gobierno.
El supervisor calcula que una subida de tipos de interés de 4 puntos —en nueve meses han subido 3,5— hará que 378.000 familias entren en situación de vulnerabilidad financiera y tengan que destinar más del 40% de su renta al pago de su deuda (en la mayoría de los casos, hipotecas a tipo variable).
Las estimaciones del Banco de España apuntan a que antes de la pandemia había 10,8 millones de hogares endeudados, de los cuales el 10,4% —1,1 millones— se encontraban en situación de vulnerabilidad. Sin embargo, la escalada del euríbor está provocando fuertes revisiones en las mensualidades de los hipotecados a tipo variable, con subidas de hasta el 55% que, sumadas al efecto de la inflación, han superado con creces las modestas subidas salariales.
Esta conjunción de factores llevará a que el porcentaje de familias en vulnerabilidad financiera crezca hasta el 13,9% y alcance los 1,5 millones cuando se
haya trasladado por completo el efecto de las subidas de tipos a las cuotas hipotecarias.
Además, si el BCE fuera más lejos y llevara el precio oficial del dinero hasta el 5% —lo que implicaría subir los tipos 1,5 puntos más— los hogares afectados podrían alcanzar los 450.000. No obstante, esta hipótesis parece poco probable a la luz de las recientes turbulencias financieras. Según informa la agencia Reuters, los analistas creen que la facilidad de depósito —el interés que la banca comercial debe pagar al BCE por aparcar fondos en sus balances— no superará el 4% (ahora es el 3%).
El aumento en la vulnerabilidad se concentrará en las clases
medias y medias-bajas, mientras que el 20% de los hogares más ricos y el 20% de los más pobres apenas notarían el impacto. No obstante, conviene recordar que la tasa de vulnerabilidad entre los hogares más pobres ya rondaba el 40% antes de la pandemia. Ante este panorama, el Banco de España señala que las medidas del nuevo código de buenas prácticas —que permite moratorias en el pago del principal y ampliaciones de
plazo en las hipotecas a determinadas familias— «ayudarían a mitigar estos efectos».
No obstante, el impacto esperado de esta medida es modesto. El Banco de España estima que la verdadera adhesión al programa podría rondar, en el mejor de los casos, los 200.000 hogares en el nuevo código. Además, otras 76.000 familias accederían al reformado (para rentas de hasta 25.200 euros). En todo caso, señala que la cifra de adhesión real será de menos de 275.000 hogares en total, pues muchas de las familias que podrían optar al primer código también cumplen los requisitos para acceder al segundo. ●