El utilitario francés da la cara por el futuro
El frontal es el principal cambio de esta actualización, que también cuenta con mejoras mecánicas y de equipamiento
El Renault Clio es un modelo utilitario con 33 años de historia, cinco generaciones a sus espaldas y más de 16 millones de unidades vendidas. Su éxito es notable, y para mantenerlo llega la actualización de mitad de ciclo, que mantiene dimensiones y una silueta muy reconocible respecto al lanzado en 2019.
El cambio más profundo, como se puede apreciar, está en el frontal, que estrena una identidad visual que tendrá continuidad en otros modelos Renault. Ello se traduce en una nueva firma lumínica, con faros más estilizados y LED verticales en cada lado. La parrilla gana en dimensiones, con el rediseñado logotipo destacado en el centro, además de elementos metálicos que conforman un original efecto degradado.
La parte trasera estrena grupos ópticos y se modifican los paragolpes, con embellecedores en contraste en diferentes tonos. También se amplía el catálogo de llantas, cuyo tamaño oscila entre las 15 y las 17 pulgadas.
En el interior los cambios son menos drásticos. La parte digital recae en una pantalla
para el cuadro de instrumentos, que puede ser de 7 o 10 pulgadas, y otra por supuesto para el sistema multimedia, con interfaces táctiles de 7 o 9,3 pulgadas.
También son nuevos los materiales empleados, algunos de ellos reciclados, y las tapicerías y revestimientos, que ahora emplean tejidos de origen biológico.
SIGUE LA VERSIÓN DIÉSEL
La oferta mecánica se ha reducido y tiene como punta de lanza la versión híbrida autorrecargable E-Tech, la misma que el Arkana y el Captur, cuya potencia final pasa de 140 a 145 caballos gracias a ajustes en el motor térmico de cuatro cilindros y 1,6 litros. Con este sistema, el nuevo Renault Clio funciona en modo eléctrico el 80% del tiempo en circulación urbana, y ello contribuye a que el consumo medio sea de solo 4,1 litros a los 100 km.
Más allá de la mecánica híbrida, catalogada además con la etiqueta Eco de la DGT, el Clio se ofrece con un motor TCe gasolina turboalimentado de tres cilindros y 90 CV, con un diésel Blue dCi de 100 caballos y con un bifuel TCe alimentado por gasolina o GLP que rinde 100 CV de potencia y puede superar los 1.000 kilómetros de autonomía.
Aunque aún se desconoce el precio, los pedidos del nuevo Renault Clio se abrirán en junio y las primeras unidades llegarán a los concesionarios en septiembre, con una estructura de gama que contempla los acabados evolution, techno y esprit alpine. Este último es la gran novedad e incluye decoración y detalles deportivos específicos que potencian la imagen del coche tanto por dentro como por fuera.
El equipamiento general también crece, con elementos destacados como el sistema de acceso y arranque sin llave, el cuadro digital y el sistema multimedia Easy Link con conexión inalámbrica a
smartphones, la cámara de 360º y hasta 20 ayudas a la conducción. ●