El SAS perdió 2,8 millones de citas sin anular con el médico de familia en 2023
El 7,1% del total de las visitas concertadas, por encima de las cifras del año anterior pide que se cancelen, mientras que los sindicatos critican que Salud «acuse» a los pacientes
«Si no vas a acudir a tu cita, anúlala. Otro paciente lo agradecerá». Es el lema de la campaña que ha lanzado de nuevo este año la Consejería de Salud y Consumo de la Junta para concienciar a la población de la importancia de cancelar las citas a las que finalmente el paciente no pueda o no quiera asistir. Una cifra que, en Atención Primaria, roza ya los tres millones en Andalucía
y supera las 600.000 en la provincia de Sevilla.
La sanidad pública andaluza atraviesa una situación compleja, que se replica en la mayor parte del resto de comunidades, debido en gran parte al déficit de médicos, lo que está provocando, por un lado, un incremento de las listas de espera y, por otro, una demora importante en muchos centros de salud a la hora de coger una cita.
La Consejería asegura ser «consciente» de estas demoras, así como del «descontento» de buena parte de la ciudadanía que quiere conseguir cita a través de los canales externos disponibles (el teléfono de Salud Responde, su aplicación móvil y la web de ClicSalud+) y que no la encuentra a corto plazo, si bien recuerdan que quienes necesiten atención «inmediata» la tienen «garantizada» acudiendo a su centro de salud. En todo caso, admiten, «hay que mejorar» y están «trabajando en facilitar» la accesibilidad en el «menor tiempo posible».
Pero los andaluces, señala el departamento liderado por Catalina García, «también deben hacer un uso correcto de los servicios públicos». Y es que el año pasado se perdieron en Andalucía cerca de 2,8 millones de citas concertadas en los centros de salud al no acudir el paciente y tampoco
anular con tiempo, lo que supone un 7,1% de los casi 39 millones de citas que se concedieron en todo el año en este nivel asistencial. El dato empeora respecto al ejercicio anterior, cuando en toda la comunidad se perdieron más de 2,5 millones de citas, un 5,8% del total; aunque no llega a las cifras de 2019, antes de la pandemia de la covid, cuando los andaluces dejaron de asistir al 8,3% de las visitas concertadas, lo que se tradujo en más de 3,6 millones.
Citas todas ellas, recuerda la Junta, que otros pacientes podían necesitar y que no estuvieron disponibles en el sistema al no mediar anulación
ninguna. Y que provocaron, además, que cerca de 300 médicos dejaran de pasar consulta en 2023 por este motivo en toda la comunidad.
Un 7,2% en Sevilla
En el caso de la provincia de Sevilla, el total de citas perdidas el año pasado, según los
datos oficiales de la Consejería de Salud a los que ha tenido acceso 20minutos, ascendió a 616.466, lo que se traduce en un 7,2% de los más de 8,5 millones de citas que se dieron en toda la provincia en los centros de salud. De estas, cerca de 7,4 millones fueron solicitadas con el médico de familia y quedaron desiertas 516.351, es decir, un 6,97%. Por distritos sanitarios, las citas perdidas con el facultativo de cabecera se situaron en un 7,17% en Sevilla (226.535); un 6,13% en el distrito Este (53.479); un 7,91% en Norte-Aljarafe (112.689); y un 6,37% en Sur (123.648).
En el caso de las citas con Pediatría, el total de visitas previstas superó los 1,1 millones, pero en 100.115 casos el paciente no asistió a consulta, lo que supone un 9%, porcentaje
que se superó en los distritos sanitarios Norte-Aljarafe (10%, 21.121); Este (9,2%, 8.281); y Sur (9,1%, 31.696); y solo el de Sevilla se situó por debajo, con un 8,5% de citas perdidas (39.017).
Los sindicatos no comparten la visión de Salud y lamentan que la Consejería «acuse a la ciudadanía de hacer un mal uso» del sistema, cuando, según afirman desde UGT-A, los pacientes dejan de asistir a las citas que consiguen porque «se las dan para dentro de 15 días y ya su problema se ha resuelto, para bien o para mal». Al tiempo que denuncian que Salud «no está haciendo absolutamente nada» para evitar esta problemática.
La Junta, por su parte, insiste en que su «obligación» es mejorar el acceso de la ciudadanía al sistema sanitario, pero reitera su llamamiento para que los pacientes anulen las citas a las que no van a acudir porque es una manera de «respetar el trabajo de los profesionales» y servirá para conseguir esa accesibilidad «tan necesaria».