La Plazuela, la banda que reinventa el flamenco fusión
El dúo presenta ‘Roneo Funk Club’, un álbum debut que mezcla el flamenco con el nu-funk y la música electrónica a la par que reivindica sus raíces granadinas
El tintineo de las cadenas anuncia la llegada de Nitro (Luis Abril) y el Indio (Manuel Hidalgo), que conforman La Plazuela, banda promesa de Granada, a caballo entre el flamenco, el funk y la música electrónica. A las puertas de la redacción de 20minutos, los medallones que cuelgan de sus cuellos anuncian la razón de su visita: Roneo Funk Club.
La Plazuela ha grabado en oro el título de su primer álbum: debutó la semana pasada en el top 20 de ventas de Promusicae. Nitro y el Indio están adentrándose por primera vez en la parte más tediosa de su oficio, la promoción. Sus breves visitas a la capital aglutinan decenas de entrevistas, firmas de discos y demás eventos, pero hoy los granadinos están de enhorabuena: gracias a su mánager tendrán tiempo para una pequeña siesta en el hotel antes de volver al frenético ritmo de la capital.
Se nota que pasan por un momento dulce, excitante. Cantaores de renombre llaman a su puerta, las salas de electrónica que frecuentan hacen sonar su música y sus coetáneos la bailan por Granada, Madrid, Barcelona… Son recién llegados, pero llevan trabajo a sus espaldas. «Bares, bautizos, bodas…», así empezó la historia, cuando Nitro y el Indio tomaron la inevitable decisión de dedicarse a la música y consiguieron pagar su primer alquiler. Pero meses después de la emancipación llegó el cambio de década, y por supuesto la pandemia. Con el público en casa y los bares cerrados, los granadinos tuvieron que regresar al nido. Poco a poco, la vida volvió a la normalidad y retomaron los conciertos, con «pases limitados de cuatro a seis», mientras hacían dinero con oficios alternativos. Y finalmente despegaron. El momento correcto y el sitio ideal: una ciudad donde el flamenco es patrimonio y la electrónica es, cada vez más, la música de moda.
La fusión
«Ahora mismo el flamenco está en un momento de revisión y de cambio, hemos tenido la suerte de vivir una época interesante en la historia de la música», resume el Indio. Los chicos de La Plazuela son, desde siempre, apasionados de músicas diferentes y por encima de todo «de los artistas que se atreven a transgredir, a darle vueltas a la cabeza».
Hace décadas, el camino lo recorrieron Lole y Manuel, Triana, Las Grecas, Pata Negra, Morente y Lagartija Nick o el propio Camarón de la Isla, influenciados por la música extranjera que llegaba a Andalucía a través de la base militar de Rota. Y ahora, explican, «esa etapa terminó y hay que abrir un nuevo discurso. Es la música electrónica la que representa los nuevos códigos, no el rock».
Y si es cierto que la electrónica es la nueva femme fatale del flamenco, Roneo Funk Club será sin duda recordado como uno de los álbumes que abrieron el camino de esta fusión –con el añadido del funk, que reluce especialmente en La Primerica Helá, Tu Palabra y Péiname Juana–. La Plazuela ha tenido la fortuna de grabar este disco con dos productores de lujo: Juanito Makandé y Bronquio.
El primero lleva tras de sí una carrera musical exitosa entre la rumba y el flamenco, a veces fusionados con jazz, y acaba de adentrarse en una nueva etapa como productor bajo el nombre de Juan Medina. Bronquio, por otro lado, se ha convertido en uno de los productores de referencia del flamenco fusión. Junto con la cantaora Rocío Márquez es responsable de Tercer Cielo, uno de los discos más transgresores que el género ha ofrecido en los últimos tiempos. Ambos han colaborado en la creación del nuevo álbum, un trabajo que remite a un espacio imaginado por La Plazuela: un club en el que se juntan flamencos y raveros, alumnos y maestros, un lugar en el que puedes sudar bailando al ritmo de un bombo a negras o dar palmas por bulerías.
De Granada a Madrid
La ciudad de Granada es sin duda uno de los puntos de ebullición cultural en España. Lo ha sido tradicionalmente y lo es ahora. También es uno de los personajes protagonistas en las canciones y el imaginario de La Plazuela. ¿Cómo es posible que una ciudad de poco más de 100.000 habitantes junte a tantos artistas de calado en el panorama nacional? «Yo creo que se suman varios factores», dice Nitro, «la
cantidad de estudiantes que vienen, lo chica que es la ciudad, su riqueza cultural y la belleza de su paisaje». «Basta con dar un paseo por la calle para inspirarte», resume.
Con los precedentes de Lagartija Nick, Los Planetas, Los Kefta Boys o Dellafuente, ahora la ciudad vive la época de «la electrónica y el mareo», que sumados al flamenco se concentran en varios locales clave para la banda: La Copera, Planta Baja y La Faraona, según explican Nitro y el Indio. Pero a medida que su proyecto crece «apetece conocer otra fiesta, otros espacios, otro tipo de gente...», y además se va haciendo incómodo lo de coger un tren a Madrid cada dos por tres y pasar la vida en habitaciones de hotel. Así que los granadinos han decidido mudarse a la capital para vivir «una etapa de crecimiento personal», sin olvidar jamás la patria chica que llevan en el corazón. Eso sí, antes de aterrizar en Madrid los chicos de La Plazuela tienen por delante un verano cargado de festivales y una gira de invierno. Y como guinda del pastel, ofrecen a 20minutos una pequeña exclusiva: están preparando un álbum de remezclas. ●
20M.ES/MÚSICA
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