La Eurocámara pide medios contra la desinformación rusa
Los grupos mayoritarios en la Eurocámara, populares y socialistas, han advertido del peligro que representa el activismo de origen ruso en internet y su intento de enturbiar los procesos electorales en Europa y han pedido medidas concretas para detenerlo. El eurodiputado del PP Esteban González Pons recordó que «en los últimos sucesos en Cataluña se han detectado, actuando a favor de la ruptura de España, más de 4.800 robots que difundían de forma constante información falsa o manipulada en internet», mientras que «algunas televisiones rusas» llegaron «a abrir sus informativos en España con «imágenes de carros de combate, de tanques, dirigiéndose a Barcelona, que sólo existían en la imaginación del editor». Su colega socialista, Juan Fernando López Aguilar, denunció por su parte que los servicios europeos de inteligencia e informes norteamericanos «señalan a miles de cuentas automatizadas, radicadas en Rusia, que atacan los valores fundacionales de las sociedades».
Extrema izquierda
Sin embargo, el eurodiputado de IU Javier Couso ha respondido con ironía que todavía «estamos esperando» a recibir las pruebas de la injerencia rusa en el debate sobre Cataluña que denunció el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, en noviembre. La italiana Barbara Spinelli, que milita también en la izquierda radical, dijo que tenía dudas sobre el papel de Rusia. «No hay pruebas de dichas interferencias. Solo desmentidos. Y en la guerra de Irak la prensa difundió informaciones falsas sobre armas de destrucción masiva».
A los diputados de izquierda se le ha unido –algo frecuente en determinados debates– la ultraderecha populista. Steeve Briois, del Frente Nacional francés, defendió a Rusia diciendo que «se acusa al Kremlin de fomentar una campaña de desinformación contra Europa. Es el chivo expiatorio ideal. No soportan que haya disidentes. En lugar de cazar a Rusia cacen la propaganda islamista», dijo.