La restauración balear se echa a la calle y pide la dimisión de Armengol
▶ La presidenta no autorizó la protesta y sí permitió dos actos independentistas
Unas 4.000 personas, la mayoría restauradores, se concentraron ayer ante el Consulado del Mar –sede del Ejecutivo autonómico– para protestar por la decisión del Ejecutivo que preside la socialista Francina Armengol de prohibir la apertura de los bares y los restaurantes de Mallorca hasta el próximo 30 de enero. Una decisión idéntica fue adoptada también por el Govern en Ibiza, debido a que ambas islas se encuentran en el máximo nivel de alerta sanitaria –el cuatro– por el continuo incremento de casos de coronavirus en el Archipiélago en las últimas semanas.
La Delegación del Gobierno en Baleares, que permitió dos actos independentistas el pasado mes de diciembre, sí prohibió la concentración de ayer alegando razones sanitaria. En la concentración se escucharon de forma continua gritos de «¡Armengol, dimisión!». Además, muchos de los asistentes portaban pancartas con el lema «¡Basta ya!». La práctica totalidad de los concentrados portaban mascarillas, pero muchos no respetaban la distancia de seguridad. Al tratarse de una protesta prohibida por la Delegación del Gobierno, previsiblemente sus convocantes serán sancionados con una multa.
«¡Esto es un atraco!»
La protesta continuó en forma de manifestación por las principales calles de Palma con paradas en el exterior del Parlamento autonómico y frente al Ayuntamiento de Palma. Ante la Cámara autonómica, cuya entrada estaba fuertemente custodiada por la Policía, algunos manifestantes han encendido bengalas y han tirado petardos. Al mismo tiempo, otros concentrados gritaban «¡Manos arriba, esto es un atraco!», «¡Libertad, libertad!» o «¡La Policía es del pueblo!».
Ese grupo de personas se desplazaron seguidamente hasta las Avenidas, la principal vía circulatoria de la capital balear, donde cortaron el tráfico durante unos minutos. Las protestas acabaron a primera hora de la tarde.
Uno de los gritos que también escucharon ante el Parlamento balear fue el de «¡Armengol, p... borracha!». Con ese grave insulto se hacía referencia, de forma implícita, a la controversia que se generó hace tres meses en torno a si en la madrugada del pasado 7 de octubre Armengol se encontraba en el interior de un bar de Palma más allá del horario permitido. La presidenta del Govern alegó en su momento que aquel día salió de ese local, el Hat Bar, «en torno a la una». En aquellas fechas, los bares y los restaurantes de Baleares debían cerrar sus puertas como máximo a la una de la madrugada. Unos días después de que la noticia hubiera sido difundida en los medios de comunicación, Armengol pidió «disculpas» de manera pública por lo ocurrido.
Durante la concentración y la posterior manifestación se desplegó un fuerte dispositivo policial con agentes
Transmisión Extremadura y Castilla y León también cierran bares y restaurantes para frenar el virus
antidisturbios. Cabe recalcar que no se produjeron incidentes destacables, aunque sí hubo varios momentos de tensión a lo largo de la mañana. En respuesta a la protesta de los restauradores, Armengol afirmó poco después que entiende «la crítica», si bien ha añadido que su «responsabilidad primera» es «proteger la salud».
Se suman más comunidades
Aunque la medida del cierre de la hostelería ha resultado ser muy impopular, dos comunidades se sumaron ayer a Baleares. La Junta de Castilla y León decretará hoy en una reunión extraordinaria del Consejo de Gobierno el cierre del interior de la hostelería, de los centros comerciales y los gimnasios en toda la comunidad. La decisión llega tras el importante aumento de la incidencia acumulada de los últimos días en la región, donde las provincias de Palencia, Ávila y Segovia ya contaban con esas restricciones por el Covid-19.
Por su parte, Extremadura decretó el cierre de los locales de hostelería, el comercio no esencial y los espectáculos y ocio en las localidades mayores de 5.000 habitantes que superen una incidencia de 500 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes a los 14 días.