El Estado reabrirá Meirás el 30 de enero, pero solo para visitar los jardines
Ya hay fecha para la reapertura al público del Pazo de Meirás. Será a partir de este próximo 30 de enero cuando la ciudadanía pueda cruzar el umbral de la finca concebida por Emilia Pardo Bazán, en manos de la familia Franco durante los últimos 80 años y actualmente bajo la posesión provisional del Estado. Pero eso sí, el Gobierno ha indicado que la visita se limitará a los jardines exteriores y no a las dependencias interiores. Para poder acceder a los salones y estancias de la antigua residencia veraniega del dictador habrá que esperar «por motivos de seguridad», al menos, hasta la segunda quincena de marzo.
El acuerdo se alcanzó ayer en la segunda reunión del comité técnico del Pazo de Meirás, del que forman parte las distintas administraciones públicas –Estado, Xunta, Diputación y concellos de La Coruña y Sada–, del que salió también la creación de un grupo de expertos al que se le encargará la elaboración del nuevo relato que tenga el inmueble en el futuro. El debate está abierto en si debe centrarse en la memoria antifranquista o, por el contrario, concederle un lugar primordial a la figura de Emilia Pardo Bazán.
De los once miembros del grupo, solo tres son expertos en la vida y obra de la escritora –Isabel Burdiel, Marilar Aleixandre y Ramón Villares–; el resto son historiadores del mundo universitario y local –entre ellos nombres acreditados como los profesores Emilio Grandío o Xosé Manuel Núñez Seixas–, o vinculados con los movimientos civiles de recuperación del Pazo a manos públicas. A priori, los defensores de Meirás como casa creada por la escritora parten de una posición muy minoritaria.
Los muebles
En paralelo, ayer se supo que la familia Franco solo podrá llevarse de su antigua residencia veraniega los electrodomésticos y aquellos bienes que no estén incorporados en el inventario judicial que se realizó entre noviembre y diciembre, a excepción de «los fondos bibliográficos y las alfombras y elementos textiles de todo tipo». Esta es la petición que ha trasladado la Abogacía del Estado al Juzgado de Primera Instancia nº1 de La Coruña en un escrito de alegaciones, y que previsiblemente serán aceptadas. La Abogacía se abre a entregar a los Franco bienes inventariados, pero deberán ser solicitados individualmente y estudiados por sus técnicos por si condicionasen «los usos futuros» que se quieran dar al inmueble.