ABC (1ª Edición)

Con Bettoni vuelven los goles y marca hasta Hazard

El segundo de Zidane dio libertad a sus hombres y el Madrid jugó de carrerilla

- TOMÁS GONZÁLEZ-MARTÍN

Decía con humor un integrante del equipo blanco que antes del partidodeb­ían tocar la cabeza del «calvo» Bettoni, porque eso da suerte. Y la dio. El ayudante de Zidane hizo bueno el lema de «nuevo entrenador, victoria segura». El refrán tenía trampa, pues David Bettoni es el segundo de Zizou y solo llevó a cabo un relevo físico. No importaba. El amigo del alma de Zinedine, compañeros desde que eran juveniles en Francia, fue tan inteligent­e que aplicó la antigua estrategia de Molowny, el maestro histórico en superar las crisis del club madrileño: dejar jugar con libertad a unos futbolista­s de primer nivel que lo han ganado todo. «Jueguen ustedes como saben», soltaba Molowny en su larga etapa como «apagafuego­s». Y Bettoni

utilizó la misma manguera. «Jueguen como saben». Y a fe que supieron. Kroos cogió el mando del caballo y la cuádriga blanca destrozó el centenario del Alavés con buen toque, dominio territoria­l, posesión de balón y cuatro buenos goles. Por fin, el campeón vigente escapaba de la pobreza rematadora y rompía sus discretos promedios de acierto.

Estaban los visitantes tan a gusto en Mendizorro­za que Benzema sumó dos tantos, ya lleva quince, después de cuatro partidos de sequía. Disfrutaba tanto el Real Madrid en el campo que hasta Hazard marcó. El belga necesitaba encontrars­e con el gol y ayer consiguió su tercera diana del curso. Pero el primer hombre que rompió la muralla blanquiazu­l fue Casemiro, con otro cabezazo a balón parado, la mejor especialid­ad del conjunto madridista. A favor del marcador, los pupilos de Bettoni se tranquiliz­aron e impusieron su clase con esa libertad de movimiento­s que tantas veces desean y que anoche fue su mejor táctica. «Merci, Bettoni».

Benzema apaga la sequía

La superstici­ón es humana y en la expedición madridista ya se comentaba que Bettoni seguirá en el banquillo físicament­e, como sucedió ayer. «Betto» dirigirá también al equipo frente al Levante, ya que las normas del Covid obligarán a Zizou a seguir confinado. Y es posible que ese encierro en casa del primer entrenador continúe más tiempo, según los datos que expresen las futuras PCR a las que deberá someterse.

Zidane se comunicó con su mejor amigo en todo momento, antes y durante el encuentro. Miguel Porlán, Chendo, el delegado del Real Madrid, era el enlace. Las nuevas tecnología­s permitiero­n el contacto continuo.

Con su clara ventaja, el Real Madrid se dedicó a mantener el control del partido. Es lo que Zidane y Bettoni les pidieron. Mandar y no regalar la pelota al Alavés. Un golpe franco, rematado por Joselu, redujo distancias. Pero Benzema firmó su segundo gran tanto, porque los dos fueron exelentes, y la diferencia de tres goles regresó al marcador, cambiado a mano por un empleado, para no moverse más.

El cambio físico en el banquillo varió también una política histórica de Zizou: la primera sustitució­n, Vinicius, entró pronto, a los 62 minutos. El brasileño relevó a Hazard, que volvió a ser titular y esta vez se marchó del césped con la alegría de su bonito gol, con un gran desmarque y un buen remate ante la media salida de Pacheco. El objetivo del cuerpo técnico es recuperar al belga sea como sea. Así lo hicieron con Asensio.

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