ABC (1ª Edición)

«En año y medio iremos de turistas al espacio»

- SALVADOR SOSTRES

—No —Han podemos cerrado las viajar. fronteras en lugar de crear y nos corredores crujen a impuestos. seguros. Nos ¡Queremos cierran trabajar! —Adaptarse.

—Ya no hay que adaptarse. Hay que anticipars­e. —¿A qué?

—La nueva ecuación: seguridad, libertad y salud. —¿Cuándo volveremos a viajar?

—Las previsione­s no sirven. Ahora el único discurso es la vacuna. —Pero trabajará usted con alguna fecha.

—En primavera. El verano. A semana Santa igual llegamos. —Especializ­ación.

—Si no eres el mejor, el cliente no va a necesitart­e. —El consumidor.

—El consumidor es el que tiene la última palabra. —¡Por fin dejaremos de ir a África!

—Los destinos en los que trabajamos en África han sabido gestionar bien el Covid. —Una cosa bárbara.

—Llevan toda la vida conviviend­o con la malaria, luchando contra el ébola y saben cómo hacerlo. —Con un éxito legendario.

—Ellos no tienen mayores. —Claro porque se les mueren antes.

—Además viven en comunidade­s que se pueden aislar.

—No. Comunidad es Andalucía o Cataluña. Aquello son tribus y no es que te puedas aislar. Es que están aisladas. —Pues muchos de nuestros clientes quieren ir. —La gente ya no sabe qué hacer. Vendrá una guerra.

—Piensa que ahora la fauna en la sabana está maravillos­a, porque durante todo este tiempo prácticame­nte no ha habido visitantes. —¿Por qué atrae viajar a la miseria?

—Yo no soy partidaria. —En África no van bien los negocios.

—Nosotros estamos especializ­ados en safaris exclusivos, somos cazadores de eclipses y auroras boreales. —Antes buscábamos el sol. Ahora los eclipses. Ya no sabemos qué hacer.

—Un eclipse solar total es un momento misterioso, mágico. —El misterio es el último recurso de las personas que no tienen secretos.

—Estoy trabajando en una expedición al Polo Norte.

—Todo muy agradable.

—Es totalmente sostenible. —Más disgustos.

—Saldremos el 23 de mayo de 2023 en una aeronave híbrida «zeppelin». —Mire, yo ya sólo voy en tanque.

—Pues en año y medio iremos de turistas al espacio. Soy la única española autorizada a vender estos viajes. Hace 12 años que trabajo e invierto en este proyecto. —Son dos naves.

—La nave nodriza y la nave espacial, el cohete. Ascienden acopladas hasta 10.000 metros. Ahí se desacoplan y la nave nodriza regresa al espacio puerto. El cohete, donde tú vas, cae al vacío durante 3,4 segundos. —Yo quiero morir escuchando a Julio Iglesias.

—Se produce la inyección de los motores y alcanzas una velocidad supersónic­a hasta llegar a 110 km de la tierra en 90 segundos. —Si es que se encienden, claro.

—Se encienden. —Válgame Dios.

—Son 4.000 km por hora. Las fuerzas de gravedad actúan y el acelerón te aplasta contra el asiento. ¡Adrenalina pura! Sientes que tu cuerpo pesa tres veces más. —En mi caso será épico.

—Tranquilo, te hacen los asientos a medida. —Y entonces qué.

—Llegas a la estratosfe­ra. Es impresiona­nte ver la curvatura de la tierra desde el espacio. Lo he vivido entrenando en el simulador. —¿De dónde sale?

—Del espacio puerto de Nuevo México. Hay que llegar 3 días antes para realizar los entrenamie­ntos, pruebas médicas y aclimataci­ón.

—¿Cuánto —3 —Si horas. subimos dura pronto, el vuelo? llego a cenar al Nobu —Te perderás de Dallas. la fiesta. Cada día estamos más más de cerca 650 del futuros día del astronauta­s despegue... apuntados. Hay —Hombre esto sí que es vender.

—Tu te ríes pero estoy convencida que será una experienci­a que marcará un antes y un después en mi vida. —¡Mientras haya un después!

—La campaña de promoción está siendo maravillos­a. —¿Qué idea hay detrás?

—Turismo sostenible. —¡Con los motores de inyección!

—El control de las emisiones de carbono es primordial. —No despegar es la mejor solución.

—Vamos a despegar y pronto. —¿Cuánto cuesta la excursión?

—250.000 dólares. —¿Puedo traer a unas amigas, por este precio?

—Es por persona. —¿Encontrará a tantos españoles que paguen por ello?

—Estoy convencida, y de momento no sabes la cantidad de safaris que he vendido gracias a la gente que he conocido promociona­ndo los viajes espaciales. —¡Safaris! ¿No podemos ir a París?

—Mi padre me llevaba mucho a París. Yo aprendí allí a comer y a beber. —A vivir.

—La vida de hotel, los desayunos. —Claro, claro. Ni rinoceront­es ni cohetes.

—El único problema es que mi padre roncaba mucho. —Un padre que ronca da seguridad.

—¡Era mi héroe! —¡Pues claro!

 ?? ABC ??
ABC
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain