Casi 200 accidentes y 11 muertes alertan del peligro del patinete
▶ Las lesiones más graves afectan a las rodillas y la cabeza, por no usar el casco
Los patinetes y patinetes eléctricos se han convertido rápidamente en protagonistas de la movilidad urbana, debido a factores como a la irrupción de las empresas de movilidad compartida y a la pandemia. Sin embargo no existen registros oficiales sobre los accidentes en los que estos vehículos se ven implicados. No obstante, recurriendo a las informaciones publicadas por los medios de comunicación, se han contabilizado, en 2019, 76 siniestros, con el resultado de cinco fallecidos, y en 2020 un total de 100 accidentes, en los que 109 personas sufrieron lesiones y seis perdieron la vida. Los afectados son mayoritariamente personas de entre 16 y 35 años.
Las lesiones que dejan pueden llegar a ser de extrema gravedad. Así, según ha explicado el director del Área de Prevención y Seguridad Vial de Fundación Mapfre, Jesús Monclús, la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias destaca que «hasta un tercio de los pacientes tienen traumatismos craneoencefálicos de diversa consideración, pudiendo llegar a comprometer su vida». Parte de la gravedad de estos accidentes se debe, según el informe ‘Crash-tests de patinetes eléctricos, riesgos asociados y recomendaciones para un uso seguro’, realizado por Fundación Mapfre y Cesvimap, a que el 80% de los conductores de patinetes no usan casco. El informe incluye los resultados de los ‘crash-test’ en los que se han realizado varias pruebas –dos de choque y dos simulaciones por ordenador– que muestran cómo un maniquí que se desplaza a 25 km/h en un patinete colisiona contra un vehículo y cómo atropella a un menor a esa velocidad.
Al analizar los resultados se comprueba que, en caso de colisión fronto-lateral, es decir cuando impacta contra el lateral de un coche, por ejemplo, la zona más afectada es la cabeza. También está expuesta a un alto riesgo la zona cervical, que puede llegar a sufrir latigazo en el momento posterior a la colisión y tras golpear la cabeza contra el suelo. En caso de atropello a un peatón menor, que es quien se lleva la peor parte, las consecuencias son daños serios en la rodilla, tórax y cabeza, que suele impactar primero, de forma violenta contra la lumna de dirección del patinete, y en después, contra el suelo. También afecta a los hombros, donde recae la masa
Diseño insuficiente
Los patinetes eléctricos no cuentan con zonas que absorban la energía en caso de impacto o atropello
del conductor y el propio patinete en el momento de impactar contra el asfalto. Por el contrario, para el conductor, el riesgo de lesión se reduce al aterrizar sobre el cuerpo del atropellado.
El peligro en las ciudades
La mayoría de los siniestros ocurren en las ciudades (98%) y en concreto, en los carriles para vehículos (66%). Suceden principalmente como resultado de colisiones (60%), atropellos (20%) y caídas (19%). En estos siniestros están implicados coches (66%), peatones (11%), furgonetas (8%), camiones y autobuses (7%) y bicicletas (6%). También se producen quemaduras por incendios, por lo que es importante evitar la manipulación del controlador de velocidad y la potencia para evitar posibles sobrecalentamientos y cortocircuitos, algo frecuente debido a la existencia de tutoriales no oficiales que explican cómo manipular las baterías y los módulos de control. El cargador debe ser, además, un elemento importante de seguridad, razón por la que para evitar accidentes hay que utilizar siempre uno recomendado por el fabricante.