Calvo trata de ubicar las críticas de Podemos fuera de La Moncloa
Unidas Podemos (UP) se sirvió de la segunda regularización fiscal de Don Juan Carlos para remarcar su estrategia de hostigamiento a la Monarquía. El vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, explicó en Twitter con ello por qué no aplaudió el martes a Don Felipe cuando elogió el comportamiento de su padre en el acto de conmemoración del fracaso del 23-F en el Congreso. Ayer, mientras los dirigentes de UP vertían reproches sobre la Corona, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, intentaba ubicarlos en el ámbito de los partidos y fuera del Gobierno.
La parte socialista de La Moncloa trabaja en una estrategia de diferenciación entre el actual Jefe del Estado y los actos privados de su padre. Calvo planteó en Canal Sur Radio que el Gobierno no puede pronunciarse sobre la relación de Don Juan Carlos con la Agencia Tributaria, como no puede hacerlo de ningún ciudadano. Pidió «respeto a las obligaciones debidas de cada uno». Y también señaló que la única alusión a la regularización es el «comentario político al que tiene derecho cualquiera» y que «naturalmente es conversación pública de partidos».
Si bien Calvo considera el hecho una «mala noticia» desde el punto de vista ético, también valora que es «el ejemplo de un país que funciona y exige cuentas a todo el mundo».
El presidente de UP en el Congreso, Jaume Asens, no lo ve así. «Nos preocupa que ante la pasividad de Hacienda
Estrategia
El PSOE trabaja en diferenciar a Don Felipe de los actos de su padre pese a las embestidas de Unidas Podemos
el Rey emérito pueda esquivar otra vez la acción de la Justicia regulando un fraude millonario», dijo ayer. El ministro de Consumo, Alberto Garzón, denunció la «facilidad» con la que «se mueven, ocultan y aparecen milagrosamente» millones de euros. «Llama la atención la de sorpresas que nos llevamos cada mes con los oscuros –y se ve que también ilegales– movimientos financieros realizados desde la institución que debiera ser la más fiscalizada de toda la democracia, por ser la más protegida y privilegiada: la Monarquía», censuró.