La UE vincula a la OTAN el desarrollo de su política militar
Los europeos quieren una autonomía estratégica sin debilitar la Alianza
Los líderes de la UE se comprometieron ayer a fortalecer las capacidades propias de defensa, pero manteniendo la relación específica con la Alianza Atlántica con la que insisten en que seguirán dispuestos a «cooperar estrechamente» en un entorno de «asociación estratégica». El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, participó en las discusiones virtuales del Consejo Europeo cuya segunda jornada terminó ayer a mediodía.
Desde la salida del Reino Unido, que era el que planteaba mayores reticencias, la UE trata de construir una dimensión militar y ayer los jefes de Estado o de Gobierno volvieron a decir que su objetivo es «aumentar la capacidad de la UE para actuar de forma autónoma» en materia de defensa y que «ante el aumento de la inestabilidad global, la UE debe asumir una mayor responsabilidad por su seguridad».
Al mismo tiempo, en la declaración conjunta dijeron que «estamos comprometidos a cooperar estrechamente con la OTAN». La presencia de Stoltenberg en la reunión tenía como objetivo contrarrestar las preocupaciones
Stoltenberg «Compartimos prácticamente la misma población, los mismos miembros y desafíos»
de varios países, sobre todo bálticos y del Este, que temen que un impulso de una Europa de la defensa podría socavar la alianza con Estados Unidos, ahora que el presidente Biden busca reconstruirla después de cuatro años de confusión con la política de su predecesor. El Alto Representante para la política exterior europea, Josep Borrell, también había participado en una reunión virtual de ministros de Defensa de la OTAN la semana pasada.
El caso turco
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se había declarado «totalmente convencido de que la nueva administración Biden ofrece una oportunidad única para renovar la fuerte alianza entre Europa y Estados Unidos. Y una asociación sólida requiere socios fuertes, por eso estoy convencido de que una UE más fuerte es una OTAN más fuerte».
Stoltenberg aseguró por su parte que entre la UE y la OTAN «compartimos prácticamente la misma población, los mismos miembros y el mismo vecindario y los mismos desafíos» y la cooperación entre ambas ha alcanzado «un nivel sin precedentes» en los últimos años y podría ampliarse aún más en áreas como las amenazas cibernéticas, el cambio climático y las cuestiones migratorias. Sin embargo, Turquía sigue siendo el principal obstáculo para profundizar en esta cooperación. Ankara, miembro de la OTAN, no reconoce al Gobierno de Chipre que es miembro de la UE y parte de cuyo territorio está ocupado por Turquía.