Cuidado con las encuestas
Son unas elecciones distintas, porque más que votar a favor de un partido o candidato, va a votarse contra un candidato o partido
IMAGINO la satisfacción de la derecha española, el PP sobre todo, con la encuesta publicada ayer en ABC sobre las próximas elecciones. Primero, por el prestigio de GAD3. Luego, por aumentar su ventaja y conseguir la mayoría absoluta con el apoyo de Vox. Por último, porque su candidata dobla en preferencia popular a su inmediato seguidor, Gabilondo y el resto queda lejos.
Espero, sin embargo, que no hagan la estupidez de dar la batalla por ganada por tres razones de igual envergadura. La primera, que una encuesta muestra sólo el ánimo popular en un momento dado, que puede cambiar en un sentido u otro. Luego, porque los acontecimientos se han acelerado hasta tal punto que en una semana la situación puede cambiar, faltando cuatro hasta votarse. Y, tercero, porque estas son unas elecciones distintas, me atrevería incluso a decir ‘especiales’, porque más que votar a favor de un partido o candidato, va a votarse contra un candidato o partido, dado el enorme cabreo que existe entre los españoles hacia la clase política.
Lo que se deduce de ello es que los contendientes deben cuidar sobre todo no cometer errores. Más o menos, los electores los conocen a todos y si intentan darles gato por liebre, lo más probable es que pierdan más votos que ganen. Y eso sirve igual para la derecha que para la izquierda, en cabeza y en la cola. Ayuso ha conectado con los madrileños, que gustan de la calle y de la libertad. Pero no debe olvidar que es la responsable de su salud y de su hacienda. Echar la culpa a Sánchez si las pierden no será bastante. Gabilondo ya ha visto de lo que le ha servido a su colega Illa dar clases de ética en sus mítines. Y Edmundo Bal parece no haberse enterado de que estar dispuesto a pactar con unos y otros no te da votos, te los quita. En cuanto a Rocío Monasterio, debe saber que su rival es la izquierda, y puede pasarle lo que a Ciudadanos si sigue sus pasos. Vox ha tocado techo por la sencilla razón de que no hay más españoles de extrema derecha y de insistir en buscarlos, sólo los perderán en provecho del PP.
En cuanto a Más Madrid y Podemos, recordarles que no hay mucha más gente a su izquierda y si siguen peleados lo que les espera es desangrase mutuamente. Se explica por tanto el tremendo cabreo de Iglesias, sobre todo al verse superado por Errejón. Se veía capitaneando la izquierda española hacia la revolución, y resulta que su exlugarteniente le supera holgadamente en las encuestas. Como para cortarse la coleta, vamos. Me atrevo a hacer un comentario frívolo: le ha dañado más entre los suyos mudarse de Vallecas a Galapagar que todo lo que ha hecho, poco, y deshecho, mucho, en el Gobierno.