El rebote del PIB de España en 2020 fue un punto más bajo que el del resto de Europa
► El FMI avisa que si la crisis sigue en Europa, se arriesga a «malestar social y más cicatrices»
La recuperación cada vez adquiere más forma de «K»: habrá países y sectores que se recuperen rápido y otros cuyo rebote llevará más tiempo del previsto. Según el último informe del FMI sobre Europa, esto puede estar ocurriendo en el Viejo Continente. «La recuperación sigue siendo desigual. Si bien la producción industrial ha vuelto a los niveles anteriores a la pandemia, los servicios aún se están contrayendo», resalta. Los países turísticos se están quedando atrás.
En consecuencia, «la recuperación en los países con sectores de servicios importantes (por ejemplo, Croacia, Italia, Montenegro, España) se quedó atrás del resto de Europa en aproximadamente un punto porcentual en la segunda mitad de 2020», resalta la institución.
El FMI también urge a los países a acelerar la inversión pública en infraestructuras «especialmente en tecnologías digitales y ecológicas». A largo plazo, señala, es cuando los países tendrán que reconstruir sus colchones fiscales.
Asimismo, llama a mejorar las instituciones del mercado laboral y mejorar las redes del Estado del Bienestar, «hacia un nuevo contrato social que ayude a hacer frente a los cambios tecnológicos disruptivos y a acelerar la automatización y abordar la desigualdad». «Esto estaba en la agenda antes de la crisis del coronavirus, ahora es aún más urgente», abunda.
El FMI plantea comenzar a retirar las medidas de protección social para comenzar a lanzar estímulos fiscales e inversiones. Este escudo social alcanzó el 5,2% del PIB en 2020 y, a través de los ERTE y demás mecanismos, protegió en 2021 a 68 millones empleados.
Malestar social
La institución también repasa peligros y posibles escenarios más optimistas a lo previsto. Entre los «mayores riesgos» que el Viejo Continente puede enfrentar figuran las mutaciones de los virus y los retrasos de la campaña de vacunación. A ello se le suma que la crisis sanitaria devenga en financiera. «Las condiciones financieras podrían endurecerse, con una revalorización del riesgo que exponga las vulnerabilidades de los sistemas financieros», advierte la institución dirigida por Kristalina Georgieva. «También podría haber malestar social y más cicatrices a medio plazo en las economías si la crisis persiste», alerta,
Por el otro lado, entre las opciones que pueden acelerar la recuperación, una producción más veloz de vacunas y una distribución más rauda podría acelerar «la transición a un mundo pos-pandémica». La actividad, además, podría demostrar que puede convivir con el virus mientras tanto y tener un mayor crecimiento, señala el FMI. Junto a ello, si se produce una implementación del Plan de Recuperación europeo, el crecimiento puede llegar antes aunque para ello, en sus palabras será necesaria «menos incertidumbre sobre la coordinación internacional política».