ABC (1ª Edición)

El Covid deja a Ainhoa Arteta en silla de ruedas

La soprano sufre una inflamació­n en las venas de las rótulas que le impide caminar

- GEMA CONTY

No han sido unos meses fáciles para Ainhoa Arteta (56 años). Vivió un infierno cuando se contagió de Covid en febrero, pero consiguió superarlo gracias al equipo médico, a su entereza y positivida­d, algo que nunca le falta.

Y ahora que pensaba que ya había dejado atrás al «bicho» –como así lo llama–, la soprano guipuzcoan­a tiene que hacer frente a una nueva secuela del virus.

Este domingo publicaba un vídeo en sus redes sociales donde se veía a un trabajador del personal de los servicios de asistencia del aeropuerto de Las Palmas de Gran Canaria llevando a la artista en silla de ruedas, después de ofrecer un recital en el Nuevo Teatro Viejo de Arucas horas antes. Tras la alarma que ocasionó en sus fieles seguidores, no dudó en hacer público que recienteme­nte ha sufrido un edema como consecuenc­ia del Covid.

«Se me han inflamado las venas dentro de las rótulas», relataba en su cuenta de Instagram. Arteta se ha visto obligada a guardar reposo por el momento, por lo que no puede caminar mucho y tiene que hacer uso de muletas o una silla de ruedas, excepto cuando se encuentra subida al escenario. De un día para otro, la artista se ha quedado sin poder andar, aunque como ha querido recalcar: «Que no cunda el pánico, estoy bien. No es nada grave pero nada agradable». Solo espera que «no venga para quedarse» y que pronto todo vuelva a la normalidad.

Le costó mucho superar el Covid del que se contagió en el Palau de les Arts de Valencia. «Al principio parecía que era asintomáti­ca pero, poco a poco, se fueron agravando los síntomas. El cuarto o quinto día se empezó a complicar la cosa porque bajó hacia los bronquios y derivó en una tos y unas flemas muy feas», contaba tras vencer al virus. Nunca llegó a ser ingresada en el hospital pero su recuperaci­ón no fue nada fácil. Quizá lo que peor llevó fue la incertidum­bre y la angustia que le ocasionaba no saber si empeoraría y, de ser así, si terminaría por afectar a su prodigiosa voz.

De nuevo ahora, Arteta tendrá que ser fuerte para superar esta secuela, que espera que solo se quede en un contratiem­po. Como ella suele decir: «De todo lo malo siempre se saca algo bueno».

EVOLUCIÓN «Al principio parecía asintomáti­ca pero los síntomas se fueron agravando»

 ?? REDES SOCIALES ?? Ainhoa Arteta, en el aeropuerto
REDES SOCIALES Ainhoa Arteta, en el aeropuerto

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain