Telenovelas
‘El principito’ aparece en la lista de los libros más vendidos
Veo en ABC Cultural los libros más vendidos de la semana y en el puesto número 9 (parezco un DJ o Joan Baez) está ‘El principito’ en una edición de Salamandra. «Nuevo en la lista». Lo primero que hago es preguntarme quién y por qué se ha puesto ahora con el librito de Saint-Exupéry. Me dicen que hay escolares que lo tienen de tarea. Vale. Pero también que es el libro preferido del protagonista de ‘Love is in the air’, telenovela turca que emite Telecinco. Una razón más para no ver telenovelas turcas. Ríete de Oprah Winfrey y su club de lectura.
A Serkan, el protagonista, cuando era pequeño su padre le regalaba una nueva edición cada vez que cumplía años. Y es el libro al que acude cuando necesita respuestas. Ya saben, «No se ve bien si no es con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos». O «Las personas mayores nunca son capaces de comprender las cosas por sí mismas, y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones». Soy más de Fran Lebowitz: «Nunca, para causar efecto, apuntes con un revólver a un niño pequeño. No lo entenderá».
Pero a Lebowitz, la culpa también es de la tele, hay que volverla a meter en alguna nevera. Ya no se causa efecto con Fran. Fran se ha convertido en una especie de Principito para mayores. Como tantas cosas. No voy a decir que ‘El principito’ sea malo, cursi o sobrevalorado, porque también están sobrevalorados ‘El guardián entre el centeno’, Borges, Churchill o el grafómano Zweig. Como todo el mundo, me he leído ‘El principito’ de pequeña. Y a Ayn Rand de adolescente pedante. Pero no los voy a leer ahora ni van a ser modelos de conducta y de pensamiento. No se me ocurriría recomendar a un niño ‘El principito’ como no se me ocurriría, para causar efecto, apuntarle con un revólver.
Ahora bien, tengo que alabar la brevedad y la claridad de la obrita de Saint-Exupéry. Sí me voy a permitir recomendárselo a Carmen Calvo y a María Jesús Montero. Quizá les ayude con la brevedad, la claridad y la síntesis para transmitir ideas (o lo que sea que tengan en sus cabezas).