«Las zapatillas nos dan un plus sobre atletas de otras épocas»
El madrileño llega a sus primeros Juegos como subcampeón de Europa en 20 kms
Al Diego García con el que he mantenido esta entretenida conversación le va más la marcha que el maratón. Como para no irle esta modalidad, en la que tiene un enorme futuro por delante a sus 25 años. Este madrileño chulapón es el actual campeón de España y subcampeón de Europa de los 20 kilómetros marcha. Estudió ADE (Administración de Empresas) y Grado Profesional de trombón. Nos conocimos hace cuatro años, cuando yo ya ‘pintaba canas’ y él movía las caderas más rápido que el cantante de Boney M.
—Nos volvemos a ver, y encima en un lugar como el Casino de Madrid. Martín, te veo igual que entonces, tal vez con el pelo más blanco y un poco encogido, pero sigues dando guerra...
—¡Empezamos bien! Tú sí que has cambiado, sobre todo profesionalmente.
—Un poco sí. Acabé mis estudios de Administración de Empresas, el Máster de Mercados Financieros y hasta he mejorado tocando el trombón. A nivel deportivo, gané mi primera medalla internacional absoluta, pero estoy muy lejos de llegar a algo parecido a tu palmarés.
—Explica a los lectores la diferencia entre marchar y correr.
—Marchar es caminar lo más rápido posible sin llegar a correr. El marchador siempre tiene que tener un pie tocando la superficie. Los dos pies en el aire significa que estás corriendo, y eso es descalificación. —Para que la gente lo entienda... ¿La manera de caminar de Mariano Rajoy es un estilo similar a la técnica de marcha? —De hecho, lo que hace Rajoy también se considera marcha. Lo bueno de nuestra especialidad es que se adapta al ritmo de todo el mundo. Puedes marchar a diez minutos por kilómetro o hacerlo a cuatro, como los que competimos a nivel mundial.
—Los Juegos están ya aquí...
—Los llevaba esperando muchos años. Confío en hacerlo lo mejor posible. ¿Algún consejo?
—Llega fresco y con ganas de competir. Ahí van el oro, la plata y el bronce de mis consejos: conoce, comparte y compite. ¡Disfruta! Solo estar en unos Juegos ya es cumplir un sueño.
—Me tranquiliza mucho, porque no es lo mismo enfrentarte a la presión de unos Juegos con el miedo de no saber lo que es eso. Estar aquí contigo, alguien de carne y hueso, que ha conseguido tan buenos resultados y que nos ha abierto el camino a tantos atletas... Me das confianza para pelear por todo.
—En Tokio partirás con una ventaja: marcharás con unas zapatillas con sistema de fibra de carbono.
—Soy un malcriado con respecto a atletas como tú, Marín, Llopart, Bikila... Las zapatillas de ahora incorporan tecnologías que nos dan un plus a todos con respecto a los atletas de otras épocas. Pero más que yo, tú sí que habrás tenido que notar diferencia entre correr con unas alpargatas de entonces y hacerlo con estas zapatillas...
—¿No te da miedo que la fibra de carbono de tus zapatillas te hagan volar y puedas ser descalificado?
—Al principio sí tenía dudas, en marcha debemos tener mucho cuidado con la técnica. Pero en cuanto empecé a acostumbrarme, vi que no me daban problema, más bien al contrario. Ese plus de reactividad que te proporcionan las ‘Skechers Speed Elite’ lo dirijo hacia adelante y no hacia arriba.
—¿Cómo entrenaste durante el confinamiento?
—Fue algo muy duro para todos. La incertidumbre por lo que estaba pasando, el miedo de que el virus nos tocara directamente... La primera parte la hice con bicicleta estática, luego me enviaron una cinta de correr, que la tuve que meter en el salón. No veíamos la tele porque la empotramos entre el sillón y la mesa, y así pude seguir marchando. El primer día que salí fue horrible, me dolían hasta las cejas. ¡Qué agujetas!
«Mi especialidad es cada vez más global y ahora te puede salir un rival muy duro de casi cualquier país»
—¿Quiénes serán tus rivales?
—Los atletas japoneses llevan unos años muy fuertes, y ahora que actúan como locales son todavía más peligrosos. Pero mi especialidad es cada vez más global y hoy te puede salir un rival muy duro casi de cualquier país.
—Te auguro un futuro muy prometedor. Eres un adolescente maduro con las ideas muy claras, ilusión, esfuerzo, trabajo y talento, ingredientes para conquistar Tokio. E iré a verte a tus conciertos.