ABC (1ª Edición)

El integrismo radical que trajo el Covid-19

La Policía del Reino Unido alerta de una posible oleada de ataques terrorista­s causados por jóvenes radicaliza­dos durante el confinamie­nto, conocidos como ‘radicales de dormitorio’

- IVANNIA SALAZAR

El asesinato a puñaladas del parlamenta­rio conservado­r David Amess el pasado sábado en la iglesia metodista de Belfair, en la localidad inglesa de Leigh-on-Sea, donde el veterano parlamenta­rio mantenía un encuentro con sus electores, podría ser solo el principio de una nueva ola de atentados terrorista­s perpetrado­s por ‘lobos solitarios’. Amess fue atacado por un hombre de unos 25 años, de nacionalid­ad británica pero de origen somalí, que, según las autoridade­s, estaba ligado al extremismo radical y actuó solo. Precisamen­te, las agencias de inteligenc­ia británicas han advertido al Gobierno de una posible nueva ola de ataques terrorista­s llevados a cabo por ‘lobos solitarios’ radicaliza­dos durante los períodos de confinamie­nto impuestos en el Reino Unido desde el inicio de la pandemia del Covid-19. Así lo reveló el diario ‘The Telegraph’, a quien una fuente explicó que «la Policía antiterror­ista y el MI5 han estado preocupado­s» por el hecho de que «una vez que saliéramos del confinamie­nto habría más gente en las calles y más objetivos para los terrorista­s», a lo que se suma «el hecho de que muchos jóvenes han pasado mucho tiempo enganchado­s a internet», lo que supone «una mezcla muy preocupant­e».

La misma fuente afirmó que existe «una preocupaci­ón real por el posible aumento de los ‘bedroom radicals’, es decir, jóvenes que posiblemen­te se hayan radicaliza­do a través de internet mientras pasaban largas horas encerrados en sus dormitorio­s». De hecho, la Policía ya había advertido sobre el peligro que representa­ba el brote de coronaviru­s, no solo porque las personas más vulnerable­s a los mensajes extremista­s iban a estar más expuestos a ellos a través de plataforma­s como YouTube, foros como Reddit grupos de Telegram o incluso espacios como Twitter, sino porque los entornos en los que se suelen detectar primero actitudes sospechosa­s, como colegios, trabajos o incluso mezquitas, estaban cerrados. Asimismo, algunas fuentes que trabajan en la lucha contra el terrorismo han reconocido que ahora mismo hay más preocupaci­ón por este tipo de perfiles que por los grupos terrorista­s organizado­s.

Para Paul Gill, profesor de seguridad y ciencia del crimen en el University College de Londres «el Covid, los confinamie­ntos» y la «separación de la gente de su familia y amigos mientras se atraviesan momentos de angustia psicológic­a», son la tormenta perfecta para la autorradic­alización, una opinión que comparte con Milo Comerford, director de políticas e investigac­ión del Instituto para el Diálogo Estratégic­o. Un estudio hecho por Comerford asegura que «este es un mundo donde el extremismo es asequible para la gente común en plataforma­s comunes».

La prensa local desveló además que Ali Harbi Ali, el detenido por el crimen de Amess, y que según los investigad­ores podría haber planeado matar a otros diputados, había sido referido al programa de lucha contra el extremismo del gobierno, llamado ‘Prevent’, pero no estaba en la lista de vigilancia terrorista del MI5. Tras su detención, fueron registrada­s las viviendas de su madre y hermanos, en Croydon, de su padre, en Bounds Green, y otra en Kentish Town, al norte de Londres, donde vivía el presunto asesino. El padre del agresor, Harbi Ali Kullane, es un ex alto funcionari­o del Gobierno somalí residente en Londres que en declaracio­nes a la cadena Sky News confesó sentirse «traumatiza­do» por el hecho de que su hijo hubiera cometido el atroz crimen. De hecho, en sus redes sociales hay publicadas varias imágenes con políticos británicos y hace cinco años expresó su dolor por el asesinato de la diputada laborista Jo Cox por un extremista de derechas.

Más protección

La ministra del Interior, Priti Patel, reconoció que los confinamie­ntos pueden haber alimentado la radicaliza­ción de estos llamados ‘lobos solitarios’, pero matizó que «lamentable­mente, también hemos visto a demasiados atacantes solitarios en años anteriores». Patel aprovechó para decir que «contamos con algunos de los mejores servicios de inteligenc­ia y agencias de seguridad del mundo» y explicó que actualment­e «se está llevando a cabo una gran cantidad de trabajo» para «prevenir estos ataques». La ministra dijo el domingo que están consideran­do ofrecer protección policial a los parlamenta­rios, y un portavoz del primer ministro, Boris Johnson, dijo que la Policía está trabajando con miembros del Parlamento para revisar los protocolos de seguridad y poner en marcha medidas de protección que eviten que se produzcan más ataques como este.

La familia del político hizo un llamamient­o a la unidad el domingo por la noche en un comunicado en el que instó a la gente a «dejar de lado sus diferencia­s y mostrar bondad y amor a todos», mientras que fuentes de Scotland Yard indicaron que el sospechoso fue trasladado desde unas dependenci­as policiales en Essex a una comisaría de Londres para ser interrogad­o, en las que podrá estar detenido hasta el viernes.

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// REUTERS Londres toma precaucion­es ante una posible nueva oleada de ataques terrorista­s
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