Educación baja el nivel de Bachillerato y deja hacer la EBAU con un suspenso
Los alumnos podrán obtener el título de manera «excepcional» con una materia pendiente si lo decide el claustro El borrador con el que trabaja el Gobierno establece una nueva modalidad general para los indecisos
Con el reloj de arena a punto de consumirse y la mirada puesta en el próximo curso, el Gobierno ultima la reforma del Bachillerato. En el borrador que maneja el Ministerio de Educación y que ayer mismo trasladó a las autonomías, añade una nueva modalidad de Bachillerato General dirigida a los alumnos que no tienen claro la rama de estudios por la que optarán o que quieran estudiar una Formación Profesional.
Además, según el borrador del nuevo decreto con el que trabaja el Ejecutivo, se permitirá obtener el título de segundo curso, y por tanto, presentarse a los exámenes de Selectividad, a aquellos alumnos que hayan suspendido una asignatura, con una decisión a favor de todo el claustro de profesores. Otro de los cambios más significativos que plantea el texto es que se pueda alargar la etapa educativa preuniversitaria hasta los tres años, en lugar de los dos que había hasta ahora, pero para excepciones muy definidas.
Para quien no lo tenga claro Una nueva modalidad
En la actualidad el Bachillerato está organizado en tres modalidades: Artes –que también cambia y se dividirá en dos itinerarios, referidos, uno de ellos a Artes Plásticas, Imagen y Diseño, y el otro a Música y Artes Escénicas–; Ciencias y Tecnología; y Humanidades y Ciencias Sociales.
El borrador del Ministerio de Educación añade una nueva opción a las anteriores, la denominada General, que está dirigida a los alumnos que no han decidido si estudiar cualquiera de las otras ramas o tienen previsto cursar una Formación Profesional. Este Bachillerato nuevo tendrá materias obligatorias, como Matemáticas generales, que algunos expertos en educación consultados por este periódico critican por las «nociones tan básicas del contenido» que incluyen. Apuntan, así, que sería más «propio» que se utilizase alguna de las otras dos asignaturas de Matemáticas incluidas en las otras modalidades.
Más fácil Selectividad con una asignatura pendiente
En el borrador de real decreto se indica que «los alumnos y las alumnas promocionarán de primero a segundo de Bachillerato cuando hayan superado las materias cursadas o tengan evaluación negativa en dos materias como máximo».
El documento indica que «excepcionalmente» los alumnos podrán obtener el título con una materia pendiente siempre que el equipo docente considere que se han cumplido los objetivos, que el alumno haya asistido a clase, que se presente a los exámenes de la asignatura y que su calificación media de los dos cursos sea de al menos un cinco. Debe haber realizado todos los trabajos. Es la primera vez que se podrá obtener el título con una asignatura suspensa y para algunos profesores, el problema es que esta práctica ya ocurría en los centros educativos y «darle carta legal» significa «abrir más la mano», de manera que si un alumno tiene dos asignaturas suspensas será «más fácil» obtener el título, señalan a ABC.
Con permiso especial Matricularse en materias de otro curso
Los alumnos podrán matricularse de asignaturas de segundo sin haber cursado la correspondiente materia de primero «siempre que el profesorado que la imparta considere que reúne las condiciones necesarias para poder seguir con aprovechamiento la materia de segundo». En caso contrario, el estudiante sí deberá cursar la asignatura del primer curso de Bachillerato.
Por circunstancias personales Tres años de etapa preuniversitaria
El documento dedica un artículo completo a la ‘organización del Bachillerato en tres años académicos’, pensado para aquellos alumnos que lo requieran por sus «circunstancias personales, temporales o permanentes». Este punto ya aparecía en la Lomloe, es decir, antes de su desarrollo en un real decreto. El escrito apunta que los requisitos que se pedirán a los estudiantes para poder acabar la etapa en tres años serán: cursar, de manera simultánea, enseñanzas profesionales de música; acreditar la consideración de deportista de alto nivel o rendimiento; requerir una atención educativa diferente a la ordinaria por presentar alguna necesidad específica de apoyo educativo, o quienes aleguen otras circunstancias que, a juicio de la correspondiente administración educativa, justifiquen la aplicación de la medida.
El horario Más peso de las comunidades
El Ministerio de Educación fijará los contenidos básicos, también conocidos como enseñanzas mínimas, que debe contener cada materia, así como el tiempo mínimo que los centros de enseñanza deben dedicarles. Pero serán las comunidades autónomas quienes completen el horario, que en principio mantendrá su esquema salvo en las materias de modalidad, que sumará un total de 87,5 horas, mientras que en la LOE eran 90 horas.
Elección entre 42 materias Nuevas asignaturas y otras comunes
El diseño curricular del Gobierno se compone de 42 asignaturas. En todo el borrador, el Ejecutivo plasma su voluntad de que el Bachillerato fomente la igualdad. Este enfoque está recogido prácticamente en todas las materias. Entre las nuevas asignaturas destacan la Literatura Drámatica, que será optativa en segundo para los estudiantes que cursen la modalidad de Música y Artes Escénicas, aunque se podrá escoger como optativa en las otras tres ramas. Otra de las asignaturas de nueva creación es la de Ciencias Generales, obligatoria en el último curso del itinerario general, que ofrecerá una «formación básica» en Física, Química, Biología y Geología.
Más participación Apoyo de la familia en el proceso educativo
En cuanto a las familias del alumnado menor de edad, se especifica que los padres o tutores «deberán participar y apoyar la evolución de su proceso educativo, colaborando en las medidas de apoyo o refuerzo que adopten los centros para facilitar su progreso. Tendrán, además, derecho a conocer las decisiones relativas a su evaluación y promoción, así como al acceso a los documentos oficiales de evaluación y a las pruebas y documentos de las evaluaciones que se realicen a sus hijos o tutelados, sin perjuicio del respeto a las garantías establecidas en la Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales, y demás normativa aplicable en materia de protección de datos de carácter personal».
Sin memorizar contenidos Enfoque orientado a las capacidades
El currículo sigue el enfoque competencial educativo presente en toda la reforma de la enseñanza en España.
El documento aclara que «la meta no es la mera adquisición de contenidos, sino aprender a utilizarlos para solucionar necesidades encarnadas en la realidad». Los alumnos deben haber adquirido una serie de competencias al terminar Bachillerato: comunicación lingüística; plurilingüe; matemática y en ciencia, tecnología e ingeniería; digital; personal, social y de aprender a aprender; ciudadana; emprendedora, y en conciencia y expresión culturales.
Como en otros niveles Perspectiva de género transversal
El currículo, como en Primaria y ESO, también contará con la perspectiva de género que el Gobierno de Pedro Sánchez acuña en todas sus iniciativas. Así, por ejemplo, en la asignatura de Biología se establece que los alumnos deberán «argumentar, utilizando ejemplos concretos, sobre la contribución de la ciencia a la sociedad y la labor de las personas dedicadas a ella, destacando el papel de la mujer y entendiendo la investigación como una labor colectiva e interdisciplinar en constante evolución influida por el contexto político y los recursos económicos».