Zumo de nazis y Naranjito
‘EL SUSTITUTO
Director: Óscar Aibar. Intérpretes: Ricardo Gómez, Vicky Luengo, Pere Ponce, Susi Sánchez, Joaquín Climent.
Ricardo Gómez ya no es Carlitos Alcántara, pero su personaje en ‘El sustituto’ no ha dejado de patear los 80. El actor, meritoria su actuación, llega en el año del Naranjito a la comisaría de Denia, donde su antecesor ha muerto en extrañas circunstancias.
Mientras se mueve por el terreno policial, ‘El sustituto’ se luce gracias a una narración ágil y a la buena recreación de la época, acotada sobre todo entre el Mundial de fútbol y el ‘cambio’ que llegó con la victoria del PSOE en las elecciones. La cinta brilla además en los apartados técnicos, con profesionales de primera.
Óscar Aibar, cineasta original que lo mismo busca platillos volantes que nazis y que ya había dirigido a Gómez en decenas de capítulos de ‘Cuéntame’, reúne un reparto brillante y nada obvio. Sobresalen todas sus mujeres y Pere Ponce, convertido casi en una versión casera de los veteranos personajes que tan bien pinta John Le Carré. Vicky Luengo y Susi Sánchez no necesitan más que un peinado y su talento para ser la misma persona, nada menos que los ojos de la historia. Ojalá se hubieran implicado aún más los otros sentidos. Todo lo que salen es poco.
Menos redondo es el guion que firman Óscar Aibar y María Luisa Calderón. A medida que se internacionaliza y se adentra en las oscuridades del pasado, el relato se trastabilla, tropieza en las grandes revelaciones, más ambiciosas que eficaces. Por suerte, no hay demasiadas escenas de acción, al menos las del cuerpo a cuerpo.
Lo ideal sería no saber nada de la parte nazi de la historia, pero el cartel y el tráiler son los primeros en descubrir el pastel. Los actores alemanes, falsos o verdaderos, dan el pego, pero los villanos españoles de ‘El sustituto’ son grotescos y esquemáticos. Si hay alguno más interesante, tiene escaso recorrido. Todo ello hace que a medida que nos acercamos a la resolución empiece a importar menos el lugar exacto de aterrizaje.