El régimen cubano militariza el país para frenar la marcha del 15-N
▶Soldados y policías tomaron las calles para impedir que los ciudadanos salieran a manifestarse por la libertad ▶Los opositores Berta Soler, Ángel Moya y el hijo de José Daniel Ferrer, entre los opositores detenidos ayer
Yunior García, organizador de la marcha, no pudo salir de su casa al seguir bloqueada por las Fuerzas de Seguridad
Desde la tarde del domingo, el régimen cubano inició la militarización total del país para intimidar a la población y evitar que los cubanos marchasen pacíficamente por la libertad de los presos políticos y en contra de la violencia policial. Numerosas personas informaron desde provincias como La Habana, Villa Clara, Las Tunas, Matanzas, Camagüey y Santiago de Cuba del clima de terror y tensión que se vivía en la isla ante la convocatoria de la Marcha Cívica por el Cambio, que se había previsto para las 15.00 hora local (las 21.00 en España).
En redes sociales, numerosos cubanos compartieron fotos y vídeos de policías, coches patrulla y autobuses cargados de uniformados y otros militares vestidos de civil, así como denuncias de actos de repudio contra los coordinadores del grupo Archipiélago, quienes convocaron la marcha para este 15 de noviembre (15-N). Una de estas manifestaciones de odio tuvo lugar contra Saily González, coordinadora del grupo Archipiélago en Santa Clara, Villa Clara, a quien gritaron ofensas como «gusana», «mercenaria», «hija de perra» y la impidieron salir de su casa.
«Estos actos protagonizados por seguidores del régimen, incluyen la permanencia de miembros de la Policía y la Seguridad del Estado en la proximidad de las viviendas», detalló el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) en referencia a estos actos de repudio que se multiplicaron ayer contra manifestantes pacíficos en el país. Otra víctima de este tipo de represión fue el dramaturgo Yunior García, organizador de la marcha, que al igual que el día anterior, ayer tampoco pudo salir de casa.
La agencia Efe en Cuba, a la que el régimen retiró las acreditaciones para informar el sábado –aunque después le reintegró dos–, aseguró ayer en Twitter que el dramaturgo se encontraba bien: «Está en su casa durmiendo. Llamamos a su puerta y su suegra nos dijo que se encuentra agotado después del intenso domingo. Los agentes que le vigilan no impidieron a nuestro equipo acceder. La bandera patria le sigue tapando las vistas».
Entre los actos de repudio destaca también el realizado en Santa Clara a la familia de Andy García Lorenzo, joven de 23 años preso desde el 11-J por manifestarse pacíficamente y a quien la Fiscalía cubana pide siete años de privación de libertad. Su familia ha puesto un cartel en su casa pidiendo su libertad y partidarios del régimen los agredieron verbalmente, llamándolos «mercenarios» y gritando consignas como «Yo soy Fidel», «Pa’ lo que sea Canel, pa’ lo que sea», refiriéndose al presidente Miguel Díaz-Canel.
La represión del régimen no paró ante nada ni ante nadie. También los sacerdotes católicos Alberto Reyes, Rolando Montes de Oca y Castor Álvarez Devesa denunciaron amenazas de detención por parte de Caridad Diego, jefa de la Oficina de Atención a Asuntos Religiosos del Comité Central del PCC. Los tres habían expresado su disposición de acompañar a los manifestantes en la marcha de ayer.
«Somos sacerdotes para predicar el Evangelio, y el Evangelio de Jesucristo habla de libertad, de justicia, de verdad, esto que es lo que nuestro pueblo está pidiendo. Si ser detenidos es el precio por ser coherentes con la predicación del Evangelio, sea. Estaremos acompañando a nuestro pueblo, caminando por nuestras calles que todavía están presas», dijo Alberto Reyes.
Acciones represivas
José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Right Watch (HRW), denunció la militarización del país: «Los reportes que nos llegan desde Cuba son desoladores. El régimen ha desplegado las fuerzas de seguridad de forma masiva. Muchos periodistas y críticos están sitiados en sus casas. Algunos han sido detenidos. La intención es clara: suprimir cualquier intento de protesta». En otro tuit alertó sobre la represión y reclamó al Gobierno cubano que parara: «En este momento las fuerzas de seguridad impiden que salgan de su casa varios periodistas y activistas. A otros los han detenido e interrogado. Y el régimen realiza actos de repudio contra activistas. Exigimos que cesen estos abusos».
La organización de derechos humanos Cubalex alertó de detenciones de manifestantes ocurridas desde la noche y la madrugada del domingo y lunes. Por su parte, el OCDH denunció una escalada represiva que se ha intensificado en los últimos días para impedir las marchas pacíficas. Según los datos reportados por la ONG, entre el 13 y el 15 de noviembre tuvieron lugar al menos 49 retenciones domiciliarias, 25 amenazas y ocho cortes de internet y actos de repudio frente a las casas de activistas, dejando un saldo de más de 260 actos represivos.
Asimismo, el grupo de trabajo Justicia 11-J, surgido tras la ola represiva desatada por el régimen cubano a causa de las históricas manifestaciones del 11 de julio, informó de al menos 12 personas detenidas o en desaparición forzada al amanecer de ayer.
Registros y confiscaciones
Entre los arrestados a la salida de sus viviendas para incorporarse a las protestas estaban, al cierre de esta edición, Berta Soler, líder de las Damas de Blanco; su esposo el expreso político Ángel Moya; el opositor Manuel Cuesta Morúa; el joven José Daniel Ferrer Cantillo, hijo del opositor José Daniel Ferrer, detenido desde el 11-J, y la artista Carolina Barrero. La Seguridad del Estado llegó incluso a irrumpir, sin orden judicial, en las viviendas de activistas del grupo Archipiélago, en las que realizó registros y confiscaciones. De igual modo, se produjeron cortes de internet de varios activistas y periodistas independientes.
La Marcha Cívica por el Cambio, re
primida en Cuba, ha sido, sin embargo, arropada en el exterior del país. Artistas de renombre como Pablo Milanés expresaron en redes sociales su solidaridad y su repudio al clima represivo en la isla. «Mi apoyo a Yunior García Aguilera y todos los cuban@s que él representa y luchan dentro y fuera de Cuba. Es hermoso que coincidamos en mostrar nuestro reclamo de libertades absolutas a través de las flores», escribió en Facebook. El cantautor criticó los actos de repudio del régimen en las últimas horas contra los promotores de la marcha pacífica. «Mi desprecio a esas turbas que usan para ‘representar lo mejor del pueblo’. Me da vergüenza ajena que gente de mi raza se preste a ser como los antiguos cazadores de cimarrones de su propio suplicio y dolor. Los están utilizando. ¡Despierten».
En cuanto a organismos internacionales, la vicepresidenta del Parlamento Europeo para Asuntos de América Latina, Dita Charanzová, enviaba ayer su apoyo a la marcha: «Hoy es un día muy importante para la sociedad civil cubana. El mundo tiene que estar mirando lo que pasa en Cuba. Estamos con vosotros», escribió en su cuenta de Twitter.