Dimisión en Cultura por el traslado de la Dama de Elche
► La directora general de Bellas Artes, Dolores JiménezBlanco, víctima del federalismo cultural del ministro Iceta
Las ideas de federalismo cultural del ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, se han cobrado la primera víctima en el Departamento. La directora general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Dolores Jiménez-Blanco, ha presentado su dimisión, según ha adelantado eldiario.es y ha podido confirmar ABC en el entorno de la historiadora, que regresará a la universidad.
Ya en su discurso de toma de posesión, Miquel Iceta anunció que implantaría el federalismo cultural como política en el ministerio, guiño a los poderes territoriales y marca propia, puesto que el político catalán ha estado presente en el diseño de los pactos del PSOE con los nacionalistas, como ministro de Administraciones Públicas. Ahora, según las citadas fuentes, el ministro ha presionado a JiménezBlanco para que apruebe el traslado de varias obras destacadas del Museo Arqueológico Nacional, entre las que destacan la Dama de Elche, los toros de Costix o la ley Flavia Malacitana.
La directora general ha puesto sobre la mesa los informes negativos que ya han desaconsejado en otras ocasiones el traslado de piezas tan fundamentales del patrimonio cultural. Pero Iceta y sus asesores han puesto un órdago sobre la mesa, por lo que Jiménez-Blanco ha decidido dimitir. El partido que pilotó el traslado a Cataluña de los papeles del Archivo de Salamanca, enviando injustificadamente varios cientos de miles de documentos que ni siquiera cumplían la ley, y que acaba de aprobar el decretazo por el que inyecta 20 millones de euros a Barcelona para la llamada «cocapitalidad» cultural y científica, se vuelca ahora, por lo que descubre esta dimisión, en el desmontaje de piezas fundamentales de uno de los principales museos nacionales, el de Arqueología, en aras de la teoría y el gusto del nuevo ministro de Cultura.
La trayectoria de esta historiadora pasa por el Museo del Prado, del que es una gran conocedora. La tensión ha acompañado su paso por el ministerio porque nada más llegar, el anterior secretario general, Javier García Fernández, que fue nombrado por el ministro José Guirao, había emprendido una reforma en profundidad de su departamento. A la llegada de Iceta, esa tensión se ha puesto de manifiesto con los deseos de implantar ese federalismo cultural que llevaría a la descentralización de las principales obras del Museo Arqueológico Nacional, para empezar, en el marco de la campaña de desafecto al papel de Madrid como capital de infraestructuras culturales.
Se va sin poder aprobar la esperada ley de Patrimonio (puesta en el congelador por Iceta) y de Mecenazgo (nunca del todo horneada), y sin ni siquiera lograr la firma del acuerdo con la baronesa Carmen Thyssen para el alquiler de su colección, dilatada sine die.
Granadina, nacida en 1959, conoce muy bien el mundo del arte, desde dos perspectivas: la universitaria y la museística, que ha compaginado a lo largo de toda su carrera. Doctora en Historia del Arte por la Universidad Complutense de Madrid y Master of Art History and Museum Training en la George Washington University de Washington DC, desde 2018 era directora del Departamento de Historia del Arte de la Complutense. Ha estado vinculada al Prado, la Phillips Collection de Washington o el Museo Guggenheim de Nueva York. Además, ha ejercido como comisaria en exposiciones para el Museo Reina Sofía («Campo Cerrado» o «Arte y Poder en la posguerra española, 1939-1953») y fundaciones.
Los informes desaconsejan el traslado de obras como la Dama de Elche, los toros de Costix o la ley Flavia Malacitana
El ministro ha presionado a Jiménez-Blanco para que aprobase ese desmontaje de piezas del Museo Arqueológico Nacional