Catetos a babor
Jaume Collboni Primer teniente de alcalde de Barcelona
Iceta tacha de «catetada» el rechazo a instalar una estatua del Quijote en Barcelona, cocapital que cogobierna el PSC
Aprovechamos la concesión del Goya de Honor a José Sacristán para recordar una de sus obras magnas, ‘Cateto a babor’, ayer reivindicada por un ministro de Cultura que, consciente de sus altas responsabilidades de Estado, no solo se deja llevar y emocionar por Freddie Mercury, sino por lo mejor de nuestra filmografía. El caso es que Miquel Iceta aseguró ayer que el rechazo del Ayuntamiento de Barcelona a la instalación urbana de una escultura de Don Quijote, hidalgo cuyo ingenio lo llevó hace cuatro siglos a la Ciudad Condal, es una «catetada». No es fácil determinar en quién estaba pensando el ministro cuando llamó catetos a los responsables de este boicot cervantino, ni cuando, también ayer, pidió que los «museos nacionales no estén solo en Madrid», con la de museos nacionales que tiene Cataluña, república con aspiraciones, señalética, programas de mano y audioguías. Aprovechamos la concesión del Goya al Mejor Corto de Animación a Ada Colau, por el apaño presupuestario alcanzado con ERC, para recordar a Iceta que en la catetada del monumento participa o debe de participar, además de la alcaldesa, el PSC, que con Collboni al frente cogobierna la cocapital del Estado compuesto, ciudad en la que sobran museos nacionales, aldeanizados por lo cateto, y falta una calle dedicada a los Reyes Católicos, que también tuvieron el ingenio quijotesco y el detalle cosmopolita de pasarse por Barcelona.