Feijóo y Moreno unen fuerzas y sitúan la economía como eje del 19-J
► El PP cree que en Andalucía la corrupción se vincula solo al PSOE por los ERE
La economía sigue siendo el eje del discurso y programa de Alberto Núñez Feijóo desde que fue elegido presidente nacional del PP. El líder de los populares volvió ayer a Sevilla, ciudad que ya forma parte de su biografía tras acoger el último congreso del partido, para participar en el primer acto de precampaña junto a Juanma Moreno, en un encuentro con empresarios andaluces, donde se habló de economía, de gestión y de experiencia. Tres palabras clave del nuevo PP, que marcarán la campaña ante las elecciones del 19 de junio, y también la carrera de Feijóo hacia La Moncloa.
Feijóo puso sobre la mesa la necesidad de abordar el nuevo modelo de financiación autonómica, que está caducado desde 2014, y que no merece la misma atención por parte del Gobierno de Sánchez como, por ejemplo, la renovación del Consejo General del Poder Judicial, pendiente desde finales de 2018. En el debate de investidura, Sánchez prometió que esta sería la legislatura de la financiación de las comunidades, pero de momento es un asunto congelado.
El líder del PP quiere rescatar una reforma necesaria ante la asfixia financiera de las autonomías. «Debemos sentarnos para ver cómo financiamos el 50 por ciento del gasto público de España, que lo gestionan las comunidades», planteó ayer. Feijóo defendió que el nuevo sistema tiene que ser fruto de un acuerdo entre las 17 comunidades, y por tanto no tratarse de forma bilateral con ninguna de ellas, como Cataluña. Reclama, además, que debe responder al «coste efectivo de los servicios públicos» que gestionan las autonomías, «y esto tiene una relación directa con las personas, no con los territorios». «Aquí no se financian territorios, se financian gastos de las personas, que son la base del sistema», advirtió. Financiar territorios, remarcó, «es lo mismo que financiar a los aliados del Gobierno».
Feijóo, que confesó que sabe más «de gestión que de oposición», abre así el abanico de sus propuestas económicas, después de presentar su plan anticrisis y la rebaja de impuestos, que fue despreciado sin contemplación por el presidente del Gobierno. Pero el líder del PP no ceja en su empeño y no se deja arrastrar por otros debates que se abren desde La Moncloa, como ocurre con la ley del Aborto, un asunto que solo trata y de refilón cuando le pregunta algún periodista por ello.
Entre Feijóo y Moreno hay plena sintonía en su lista de prioridades, que pasan por hablar de gestión, de economía y de nuevas bajadas de impuestos. El presidente de la Junta de Andalucía y candidato a la reelección aprovechó para anunciar una nueva «bajada masiva de impuestos en todas las figuras tributarias». Empezará por el tributo que menos ha modificado en estos años, el de Patrimonio. «Hay que seguir tocándolo y mejorándolo porque queremos competir con Madrid y para eso tenemos que ser competitivos y más rápidos que ellos», avisó.
Preocupación «cero»
Pero ese intento choca con la estrategia que están viendo desde el Gobierno y el PSOE, de nuevo agitando la bandera de la corrupción contra el PP a pocas semanas de unas elecciones. Fuentes parlamentarias del PP aseguran que la preocupación en el partido por las escuchas de Villarejo, sobre hechos ocurridos hace una década, es exactamente «cero», y sostienen que ya no les quita un solo voto. Lanzan una advertencia: en Andalucía «la corrupción se vincula al PSOE por el caso de los ERE», por lo que esa estrategia puede volverse en contra del Gobierno. Desde el PP andaluz aseguran que no tienen intención de usar los ERE como argumento de campaña, pero si el PSOE ataca con la corrupción, ellos responderán.
En este primer acto de precampaña de Feijóo, aprovechó para hacer una defensa férrea del Estado de las Autonomías y puso a Andalucía, con Moreno al frente de la Junta, como ejemplo del éxito de ese modelo. «Andalucía es, probablemente, la comunidad autónoma más importante de España porque es la prueba de que la autonomía es una herramienta útil en las políticas del Estado», aseguró. Sin citarlo, criticó a Vox por denostar el sistema autonómico y sin embargo querer entrar en los gobiernos regionales.