Carlos Sainz logra al fin su primera pole
► El piloto de Ferrari hace cumbre en Silverstone y consigue salir el primero en una carrera diez años después de la última conquista de Alonso
Carlos, el hijo mediano de Carlos Sainz y Reyes, hace tiempo que ha dejado de vivir a la sombra de su padre, el bicampeón del mundo de rallies (1990 y 1992), y que se ha desprendido del apéndice de júnior que le acompañaba por todos los circuitos del calendario de la Fórmula 1. Ayer, en Silverstone, dio un paso más en ese proceso de emancipación al lograr la primera pole de su vida una década después de que Fernando Alonso, también con Ferrari, lograse la última de sus 22 poles. Fue el 22 de julio de 2012 en Alemania (Hockenheim) y ha llovido mucho desde entonces. Tanto como lo hizo sobre el circuito británico, una circunstancia que fue clave para que el piloto madrileño cerrara el crono en 1:40.983, un tiempo que le permitió superar a los Red Bull y, sobre todo, a Max Verstappen, que se había mostrado intratable todo el fin de semana.
Le falta ganar aún un gran premio, pero Carlos Sainz avanza imparable, sin descanso, como un motor diesel, sin desanimarse por los contratiempos que impiden que su talento se imponga al retroceso en el que parece estar inmerso Ferrari este año tras los numerosos problemas de fiabilidad de sus monoplazas en carrera. Se mantiene quinto en el Mundial, con 102 puntos, a 73 del líder Max Verstappen, con el que compartió confidencias y equipo en sus inicios, en 2015, cuando ambos pilotaban un Toro Rosso. Si el neerlandés ha ganado cinco de las últimas seis carreras, el español ha logrado sumar un repóker de podios este año (fue segundo en Bahrein, Mónaco y Canadá, y tercero en Arabia Saudí y Miami).
No lo ha tenido fácil ‘Carlitos’, como le llaman en casa, que ha tenido que ganarse el volante de los monoplazas que ha pilotado. Sus buenas actuaciones en Toro Rosso le catapultaron a Renault (2018-19) donde se confirmó. Y a sus 26 años le cayó la responsabilidad de sustituir a Fernando Alonso como cabeza de cartel de McLaren, que le fichó en el momento más delicado de su historia.
La hora de la verdad de Sainz, lejos de hundirle, le encumbró como uno de los pilotos con más futuro de la F1 al terminar sexto en el Mundial, solo por detrás de los intratables Mercedes (Lewis Hamilton y Valtteri Bottas), del insaciable Verstappen y de los dos Ferrari (Charles Leclerc y Sebastian Vettel). Con los de Woking logró subir al primer cajón de su carrera, en Brasil. Un tercer puesto no exento de épica. Sainz se convirtió en el segundo piloto de la historia, tras Peter Whitehead en 1950, en pisar el podio tras salir desde la última posición. Eso sí, es el que más carreras ha necesitado en toda la historia de la Fórmula 1 para lograr su primer podio: 101. La sexta posición en 2020 le permitió fichar por Ferrari al año siguiente.
Alegría en Ferrari
«Hemos sufrido. Estas sesiones en mojado son muy difíciles, pero es un día para estar contentos. Él lleva toda la temporada peleando ahí arriba por conseguir la pole y en el día más difícil, en el que todo se ponía complicado, ha sido capaz de conseguir una vuelta espectacular. No es ningún secreto que los coches de esta temporada no le han ido bien por su estilo de conducción y al final, poco a poco se van viendo los resultados. Creo que ha hecho la mejor vuelta y ahí está su primera pole. Creo que mañana (por hoy) va a estar reñido», explicaba emocionado Caco mientras Sainz sonreía en su box. Caco es el apodo de Carlos Oñoro Sainz, primo del piloto e hijo de Juan Carlos Oñoro, excampeón de España de Rallys que ejerce de confidente y representante del flamante ‘poleman’ de Silverstone. En el box de Ferrari ni se lo creían. «Será una situación completamente diferente. Queda mucho por decidir: los neumáticos y las paradas que haremos», explicaba una aliviado Mattia Binotto, jefe de equipo de Ferrari. Fernando Alonso, que apuntaba más alto, saldrá séptimo.