Ya lo dijo Otegi
No tiene límite. La misma semana en la que se conocen más detalles del pacto entre el Gobierno y Bildu sobre la Ley de Memoria Democrática, Pedro Sánchez se planta en Ermua (por supuesto, en Falcon) para recordar a Miguel Ángel Blanco. Con sus santos... asesores. No tiene ningún sentido del cinismo. Es capaz de esconderse detrás del Rey, alejar a la gente, encerrar a los periodistas y poner carita de compungido a la vez que se pliega ante la tal Mertxe Aizpurua.
La clave nos la presentó sin tapujos Arnaldo Otegi. Del enemigo, el consejo, sin cortarse un pelo. Hace 25 años, el líder de Batasuna estaba paseando tan pichi por la playa de Zarauz, mientras sus colegas torturaban a Miguel Ángel Blanco. Hoy, un cuarto de siglo después, este cobarde pacta de tú a tú con Marlaska, con Bolaños y con Sánchez. Conviene recordar lo que dijo Otegi, ante un grupo de súbditos, hace muy pocos meses: «Lo que nosotros queremos es que pasen estos dos años de legislatura y que este Gobierno cumpla otros cuatro años. Por un lado, porque sabemos quién es la alternativa (...), pero a eso no se limita nuestro interés, porque estos algún día van a llegar. Necesitamos tiempo para preparar al pueblo porque tenemos que solucionar el problema de los presos». Se refería a que el PP llegará «algún día» al Gobierno. «El problema de los presos» es como sacarlos de la cárcel. Al respecto, añadió: «Esos 200 presos tienen que salir de la cárcel. Si para eso hay que votar los Presupuestos, los votaremos».
Este cobarde es el jefe de los macarras que quisieron linchar a la comitiva municipal en Pamplona. Otegi se presenta de la mano de ERC a las elecciones europeas. Este tipejo es el socio más fiable que tiene Pedro Sánchez. Más fiable que el chulazo de Rufián y que ‘super-Yol divina de la muerte’. Y, aún su sanchidad se planta en Ermua para hacerse el sentidito. Y todo por un apoyo parlamentario para «estos dos años y otros cuatro años más». Y todavía echa la culpa de su propio derrumbe a los poderes mediáticos y a «los cenáculos de la Villa de Madrid con señores fumando puros». No tiene límite. Nadie se atreve a decírselo, pero va desnudo. Por muy apuesto que le vea Tezanos, ese nivel de cinismo resulta ridículo.
La clave: si usted fuera Otegi, Junqueras o Pablo Iglesias, ¿a quién querría en La Moncloa otros cuatro años más?
P. D.: el próximo viernes 15 de julio, Sánchez recibirá en La Moncloa a Pere Aragonès en una nueva cumbre ‘BI LA TE RAL’. Y todavía les queda año y pico hasta las próximas elecciones generales.