Los hoteleros se borran de los viajes del Imserso ante la negativa de la ministra Belarra a subir precios
► Hoteles de Benidorm planean un programa en paralelo para suplir al del Gobierno
La ejecución de la próxima temporada de los viajes del Imserso peligra por la polémica decisión del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 de no renovar los precios de los viajes a pesar de la espiral inflacionista que está soportando un sector hotelero que ha decidido plantarse ante la pasividad del Gobierno para reformar el programa. Buena parte de la planta hotelera que habitualmente participa en el plan de viajes sénior en la Comunidad Valenciana ya ha comunicado a la adjudicataria de los lotes que no prorrogarán sus contratos. Una respuesta a la que también empiezan a sumarse empresarios de Baleares dejando entre ambas regiones 300.000 plazas en el aire, más de un tercio de las 816.000 disponibles para el próximo año a nivel estatal.
El sector considera que la gestión del ministerio que dirige la titular del departamento y secretaria general de Unidas Podemos, Ione Belarra, es una ruina «multiplicada por la inflación en las maltrechas cuentas hoteleras tras dos años de pandemia», en palabras del presidente de la patronal de los hoteles valencianos y de Benidorm (Hosbec), Toni Mayor. La zona del Levante gestiona 150.000 paquetes del programa y aporta unas 7.000 camas hoteleras, por lo que un boicot generalizado en la región podría poner contra las cuerdas a buena parte de las plazas del plan de viajes para mayores que arrancará a mediados de octubre.
Los hoteleros valencianos aseguran a este periódico que ya son «muchos» los alojamientos que se han opuesto a seguir participando en los viajes del Imserso por la inasumible falta de rentabilidad que sufren. Denuncian que tienen que hacer frente a pensión completa, con bebida, animación, wifi y todos los servicios de un hotel de 4 estrellas a 22 euros por noche y persona. Unos precios que ya consideraban irrisorios antes de la presión inflacionista, y para los que habían pedido su revisión al Gobierno en varias ocasiones durante los últimos años. Con la guerra de Ucrania como puntilla, los costes para los establecimientos hoteleros han aumentado un 30%, lo que ha disparado las pérdidas de las empresas adscritas al programa durante la última temporada de viajes entre negativas del Ejecutivo para incluir al sector en el plan de medidas económicas contra los efectos del conflicto bélico.
Esta suma de factores ya ha provocado que los hoteleros valencianos muevan ficha y ya planean la creación de un Imserso a espaldas del Gobierno. Hosbec ya se reunió el pasado mes de julio con la Federación Española para la Defensa de las Personas Mayores para empezar a sentar las bases «de un programa de viajes sénior de carácter privado» que supla los beneficios de la desestacionalización que producen los viajes del Imserso, «pero en un marco económico ajustado a la realidad que vivimos». En el mismo sentido, los hoteleros valencianos y de Benidorm tienen previsto reunirse con más asociaciones y colectivos de mayores, «que siguen muy interesados en continuar con los viajes durante la temporada baja y que eligen Benidorm como uno de sus destinos preferentes».
Pero el veto a la próxima campaña se extiende a otras regiones. En Baleares, que recibe a alrededor de 150.000 benefeciarios del programa, el planteamiento de parte de los 44 hoteles que participan es el mismo que el de los alojamientos valencianos. Tal es la preocupación que los representantes de los trabajadores del sector en la región han hecho un llamamiento a hoteleros y Gobierno para «llegar cuanto antes a un acuerdo para que Baleares tenga este año turistas de la tercera edad a través de los viajes del Imserso», aseguró el pasado lunes en un comunicado la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT.
Fuentes del sector aseguran que todavía no perciben un rechazo de los hoteles de la comunidad insular de cara a la próxima temporada de viajes del Imserso, pero señalan que ya el año pasado la negativa de Belarra para actualizar los precios provocaron que algunos establecimientos declinaran prorrogar su participación en el programa de turismo para mayores.