ABC (1ª Edición)

Netflix podría haber matado la telenovela; ahora es su salvación

Los seriales colombiano­s ‘La reina del flow’ y ‘Café con aroma de mujer’ han sido un éxito mundial en la plataforma

- ÓSCAR RUS

Hay un hombre en España que hizo suya –nuestra– la telenovela: Jaume Banacoloch­a. El primer ejecutivo de la productora Diagonal fue pionero hace 28 años con ‘Poblenou’ en la televisión pública catalana. Aquella, sobre los vecinos de un barrio barcelonés, bebió de otras como la británica ‘EastEnders’, todavía en el aire tras 37 años, y la australian­a ‘Neighbours’, cuyo final se emitió la semana pasada tras 8.903 episodios. No era la fórmula de la Coca-Cola, era la fórmula del culebrón: cómo escribir y rodar 30 minutos diarios. Aquel mismo año, 1994, llegó la vasca ‘Goenkale’ y en 1996, Telecinco abrió ‘El súper’. A Televisión Española le iba divinament­e con las latinoamer­icanas. El resto es historia, o sea, ‘Amar es para siempre’, cuya temporada 18 empieza a rodarse el próximo lunes para emitirse en Antena 3 a partir de septiembre. Ahora son 45 minutos diarios y la trama debe ir como un tiro. Es, de momento, el único serial nacional junto a ‘Servir y proteger’, en La 1, cuya séptima temporada empezó en julio. ¿Es el ocaso o el resurgir de un género que garantiza trabajo fijo y acompaña día a día al espectador?

Banacoloch­a, productor de ‘Amar’, cree que tienen cuerda para rato. En Diagonal tienen dos proyectos; uno de época y otro contemporá­neo. Las cadenas se la juegan menos con una serie diaria que con una semanal, pues el público de la primera es más fiel. Hasta Mediaset está preparando una para Cuatro, cuyo último título memorable fue ‘Ciega a citas’ (2014).

Mitad comedia romántica y mitad melodrama de época era ‘Dos vidas’, el último serial de TVE. Acabó en febrero tras un año y sin relevo. La misma productora, Bambú, está preparando para La 1 ‘La promesa’. «Fuimos muy ambiciosos. Empezamos contando el final. Todos sabíamos que no podía ser tan larga como ‘Acacias 38’, pero sí podríamos haber estirado algunas tramas», comenta la coordinado­ra de guion, Alba Lucío. Ella también cree que la tierra es fértil: «Cabría pensar que las plataforma­s pueden acabar con un formato tan antagónico: series larguísima­s con presupuest­o bajo. Sin embargo, las que se están poniendo en Netflix están funcionand­o muy bien». Caso de las colombiana­s ‘Café con aroma de mujer’ y ‘La reina del flow’. «Está habiendo un renacer del culebrón a nivel mundial. Las plataforma­s están mirando con ojos golosones ese tipo de contenido porque llena muchísimas horas y al que la gente se engancha con una pasión que ocurre poco. Hace un par de años diría que las plataforma­s estaban matando la diaria y ahora puede haber un renacer del culebrón gracias a ellas. Quizás, pronto, veamos una serie diaria española en una plataforma», continúa.

Cambio de horarios

En Atresplaye­r Premium, los seguidores de ‘Amar es para siempre’ pueden ver los siguientes cinco capítulos. Ya ocurría con ‘El secreto de Puente Viejo’. Es un modo de operar que la televisión pública británica adopta en verano: cada lunes, a primera hora, sube a la web cuatro episodios de ‘EastEnders’, pues la parrilla diaria varía por los eventos deportivos. Aquí, los espectador­es de ‘Servir y proteger’ ya se han quejado del baile de horarios por culpa del Tour de Francia. También pasa al revés: personas que a la hora de la cena recuperan la entrega emitida esa tarde.

«A la hora de escribir ya no piensas que van a pasar 24 horas hasta que el espectador vea el siguiente capítulo», admite el creador de ‘Dos vidas’, Josep Cister, especializ­ado en las diarias tras ‘El secreto de Puente Viejo’ y ‘Acacias 38’. Todas ellas se emitieron en la sobremesa, cada vez más tardía, pero las nuevas podrían ir a las ocho de la tarde, como antaño. Todo vuelve. Hasta la pana.

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// NETFLIX William Levy y Laura Londoño protagoniz­an la serie ‘Café con aroma de mujer’

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