Al cuidado del dinero negro para pagar favores

No todo el dinero que llega a manos de los narcotraficantes se blanquea. Mucho hay que guardarlo en efectivo para seguir haciendo operaciones ilícitas. Así, las organizaciones, además de lavar millones, también ocultan grandes cantidades de efectivo. Los agentes de la Guardia Civil aún recuerdan al gruista que tenía 150.000 euros en el colchón del dormitorio en La Línea de la Concepción o al que le incautaron una bolsa llena de dinero para los gastos diarios en su chalé de Estepona.

Son dos ejemplos de ingentes cantidades de ‘cash’, que tiene que estar bien oculto en lugares donde no se sospeche para evitar incautaciones. Y ahí las grandes organizaciones tiene guardianes entre aquellos que les deben favores. Nada es gratis cuando se le pide a un capo. Algunos ayudan a familias o, incluso, han pagado la reforma de las casas de alguien que no podía permitírselo y lo necesitaba. A cambio, esas familias están en deuda con el narco. La forma de cobrárselo es sencilla: deben ser guardianes del dinero.

Estas personas tienen el dinero a la espera de que le haga falta a la organización. «Cuando lo necesitan llaman para que alguien pase a recoger 50.000 ó 100.000 euros», explican fuentes de la lucha contra el narcotráfico, que reseñan que estas familias reciben una llamada, preparan el dinero y alguien se pasa para llevárselo. «Es una forma también de evitar perder todo el dinero si hay una operación contra ellos», aseveran las fuentes.

A comisión

Pero estas guarderías no solo las hacen las personas que deben algo a la organización, en algunos casos, la Guardia Civil, ha detectado también a personas que se dedican a esto a cambio de un pellizco económico. «Lo hacen a cambio de una comisión por el dinero que van a custodiar», afirman las fuentes. En Fuengirola, la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil desarticuló un banco para los narcos. Financiaban actividades o lavaban dinero a cambio de una comisión. Los detenidos en aquella operación llegaban a ingresar hasta 250.000 euros en una sola jornada.