Reino Unido espera tener vacunados a los mayores de 50 en mayo
El país ha administrado más dosis que Alemania, Francia e Italia juntas
tar a 40.000 personas, cuya media de edad fue de 37 años. En los meses posteriores sumó otras 20.000. En total, llegó a doblar el número de voluntarios que suele captar en un año normal. Su actual censo de colaboradores demuestra que en las nuevas incorporaciones han ganado peso las franjas entre los 20 y los 29 años de edad, al representar ya el 41, 2% del total, seguido de los jóvenes-adultos entre los 30 y los 44 años (33%). Todo esto en detrimento de los voluntarios más mayores, que apenas supusieron el 3,2 por ciento de todos los que han solicitado sumarse a esta ONG durante el año pasado.
«Es bueno»
Para todas las organizaciones, esta inyección de personas jóvenes ha supuesto una ventaja absoluta. «Siempre es bueno que la gente más joven tome conciencia del trabajo que se está haciendo. Les sirve para visualizar y descubrir un tipo de actividad que no imaginaban que podía llegar a significar tanto para muchas personas que en este momento lo están pasando mal», comenta Juan Vicente Peral, presidente de la Federación Española de Bancos de Alimentos (Fesbal). En esta entidad, la edad media de los voluntarios ha pasado de los 70 años a los 55 como consecuencia del Covid.
El técnico de Cruz Roja también considera un «éxito» que las plantillas de colaboradores estén copadas por los jóvenes. «Significa que seguimos siendo atractivos para ese segmento de la población y eso garantiza nuestra sostenibilidad». Para Cáritas Madrid, esta inyección de juventud les ha permitido llevar adelante más proyectos vinculados a la formación de la población vulnerable o mayor de edad en el uso de las nuevas tecnologías o sacar adelante nuevas colonias urbanas para los niños. «En todas estas cuestiones hemos ganado mucho gracias a los jóvenes. Escucharles además nos está dando una nueva visión para cambiar nuestras acciones en muchos otros campos», comenta Algarate.
Tras el intenso aluvión de los últimos meses, las entidades sociales intentan ahora retener a toda esa masa de colaboradores con el fin de poder consolidar y ampliar sus proyectos. La mayoría de las organizaciones coincide en que el hecho de «trabajar directamente con la población vulnerable y poder palpar la utilidad de sus acciones» les está ayudando a que los voluntarios mantengan por el momento su compromiso.
Solo Estados Unidos supera a Reino Unido en el número de vacunas administradas contra el Covid-19. Ya ha inyectado más de 12 millones de las primeras dosis, más que Alemania, Italia y Francia juntas, y va camino de cumplir el objetivo de proteger a los grupos más vulnerables a mediados de febrero. En una entrevista a la BBC, el responsable de la vacunción contra el Covid-19 en el Reino Unido, Nadhim Zahawi, se mostró además confiado en que su país podrá tener inmunizados a los mayores de cincuenta años para el próximo mes de mayo.
El ministro de Salud británico, Matt Hancock, había señalado el viernes que muchas cosas «deberían ir bien» para alcanzar la meta, recalcando que el abastecimiento del fármaco es el factor limitador «más difícil» de superar en la campaña de inmunización. Zahawi admitió que se trata de un objetivo «duro» pues «muchas personas que son extremadamente vulnerables tienen que ser contactadas por sus médicos de cabecera y algunos no pueden trasladarse hasta los hospitales».
Pero gracias al reclutamiento de voluntarios y la disponibilidad de vacunas, Reino Unido está consiguiendo administrar casi un millar de vacunas por minuto. No obstante, la estrategia británica, que prioriza la primera dosis, ha hecho que solo 511.447 británicos hayan recibido las dos dosis de la vacuna. En España, según los datos del viernes, había 682.900 personas con ambas inyecciones.
Nuevas rondas
El país, que ayer registró 15.845 nuevos contagios y 373 fallecidos, sigue pendiente de las nuevas variantes del coronavirus. Entre las que más preocupan a los científicos se encuentran las denominadas variantes británica, sudafricana y brasileña, que parecen propagarse más rápidamente que otras. En base a ello, el responsable británico de la inmunización apuntó que es probable que, tras la primera ronda de vacunación, haya que recurrir a nuevas campañas anuales o a «refuerzos en otoño» para frenar las nuevas cepas «de la misma manera que lo hacemos con las vacunas contra la gripe, donde se observa qué variante del virus se está propagando por todo el mundo», dijo Zahawi.
«En la crisis económica vimos una solidaridad abrumadora, pero nunca como la que estamos viviendo
ahora»