Los expertos recuerdan su complejidad y que conlleva intereses
Un producto que añade un extra a la pensión de jubilación, pero del que se debe conocer en profundidad la letra pequeña y sus implicaciones futuras. Es la hipoteca inversa, un préstamo que permite a los mayores de 65 años seguir residiendo en la vivienda de la que se es propietario, mantener la titularidad y, a la vez, recibir una renta mensual o pago único con la casa como garantía. A pesar de sus ventajas, los expertos avisan de su complejidad y de que conlleva el abono de intereses a la entidad prestamista. Cuando el titular del inmueble fallezca, los herederos se enfrentarán a dos opciones▶ saldar la deuda y quedarse con la casa o venderla y pagar lo que se debe.
Su penetración aún es escasa en España y su ritmo de crecimiento desde su introducción en 2007 se vio truncado por la desconfianza que caló entre los españoles hacia los productos financieros tras la crisis de 2008. Las cifras de contrataciones, y pese a que el producto ha llegado a ser recomendado por el Banco de España, son bajas –con solo 108 firmas en 2020– por diferentes factores. «Tiene una regulación escasa, quizá haría falta mayor detalle normativo», explica la portavoz del Consejo General del Notariado y decana del Colegio Notarial de Andalucía, María Teresa Barea. «La segunda razón es que esta figura nueva no se acompañó de pedagogía ni de publicidad hacia los ciudadanos. También influyó el factor de la crisis inmobiliaria con el consiguiente bajón en el valor de las viviendas», añade. «En la cultura jurídica tradicional española, que es la latina, el concepto de herencia y de formar y conservar un patrimonio para los hijos también está muy arraigado», opina Barea.
Para los responsables de Óptima Mayores, consultora dedicada a la gestión y comercialización de hipotecas inversas, el problema no es de demanda, sino de oferta. «Las entidades lo consideran un negocio marginal dentro de su negocio hipotecario; para ellas es un producto difícil de vender que exige mucha especialización y dedicación. Les preocupa además la inseguridad generada por las sentencias contrarias en cláusulas suelo, preferentes y multidivisas, teniendo en cuenta el colectivo al que se dirige esta modalidad▶ mayores de 65 y dependientes», explica Ángel Cominges, consejero delegado de Óptima Mayores.
«Existe una desconfianza generalizada, e incluso rechazo, ante cualquier tipo de producto de innovación financiera en el que medie la vivienda en propiedad o en el que haya intermediarios financieros por los escándalos que surgieron en la crisis de 2008», apunta Pedro Serrano, profesor titular de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Carlos III.
Desde la asociación de consumidores Asufin no recomiendan su contratación por su alto coste en intereses y su falta de transparencia. «No todo el mundo es consciente de que es una hipoteca y de que se pagan intereses. Nunca te van a dar el valor máximo de una casa y encima se aplican intereses. Por poner un ejemplo, no es que te hayan dado 80.000 euros de una casa con un valor de 200.000; sino que cuando te mueras, te habrás gastado 150.000», advierte la presidenta de Asufin, Patricia Suárez. Además, los seguros que se incluyen terminan por disparar los precios
Para solucionar los problemas derivados de la falta de cultura financiera, Miguel Usábel, profesor titular de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Carlos III, recuerda la necesidad de implantar en el mercado un asesoramiento independiente. «Estos productos no son tan fáciles de valorar por una persona sin una gran cultura financiera y con asesoramiento independiente se rompería la asimetría y se evitarían abusos. La sociedad se sentiría cómoda con esas soluciones, se permitiría florecer a este mercado y llegar a los niveles de Francia en nuda propiedad o del Reino Unido en hipoteca inversa», sentencia.
Además, durante los últimos años han surgido productos, como el de la vivienda inversa, que vienen a solucionar algunas lagunas y que comercializan en la socimi Almagro Capital. «Con nuestro producto estás transmitiendo la propiedad de la casa y podemos dar más dinero, es decir, el equivalente al valor de la casa menos el coste que va a tener ocupar la casa», explica el socio fundador de Almagro Capital, Luis de Ulibarri.