El PP pide a Marlaska que haga frente al terrorismo callejero
Quieren que convoque la Junta de Seguridad, mientras Sàmper se reunirá hoy con Colau
La extrema violencia protagonizada por independentistas y anarquistas en las calles de Barcelona, en los últimos días tras la encarcelación del rapero Pablo Hasel (condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona), empieza a salpicar políticamente al Gobierno de España. Así lo considera, al menos, el PP, que ayer dirigió sus críticas al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al que le exigió la convocatoria «urgente» de la Junta de Seguridad de Cataluña para que coordine la actuación policial contra este «terrorismo callejero».
La noche del sábado los violentos quemaron un furgón de la Guardia Urbana con, al menos, un agente en su interior, que tuvo que salir del vehículo por la puerta del copiloto. Los destrozos del mobiliario urbano fueron numerosos. Se asaltaron cajeros y entidades bancarias y un hotel. La violencia fue extrema en las calles de Barcelona. Ante esta situación, Pablo Montesinos, vicesecretario de Comunicación del PP nacional, se preguntó dónde está el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez.
Los populares cargaron todas las tintas contra Grande-Marlaska, al que acusaron de estar «absolutamente desaparecido», y Sánchez, que está al frente de un Ejecutivo que «calla, guarda silencio y agacha la cabeza» frente a la mitad del mismo –en referencia a los ministros de Podemos– que «alienta, jalea y avala» a los que protagonizan los ataques.
Por todo ello, Montesinos, desde Guadalajara, informa Ep, exigió a Grande-Marlaska que «reaparezca» y «actúe» convocando la Junta de Seguridad de Cataluña, para que sea el ministro el que coordine la respuesta policial a la extrema violencia.
«La receta de Thatcher»
En esta misma dirección se manifestó el líder del PP catalán, Alejandro Fernández. Desde su cuenta de Twitter calificó lo sucedido la noche del sábado al domingo de «actos terroristas» y defendió, como respuesta, «la receta de Margaret Thatcher».
La que fuera primera ministra del Reino Unido entre 1979 y 1990 tuvo que hacer frente a una de las mayores oleadas de altercados del último siglo. En 1981, por ejemplo, cientos de agentes fueron heridos y se quemaron coches de policía y negocios en la zona de Brixton, donde se acumulaban problemas sociales. Aunque la policía se vio desbordada en algunos momentos, finalmente, se ordenó desplegar un gran operativo que logró aplacar las protestas.
Por otro lado, en plena fase de negociación entre ERC, Junts y la CUP –partido, este último, que quiere desmantelar a los antidisturbios de los Mossos d’Esquadra–, Miquel Sàmper (Junts), consejero de Interior, se reunirá hoy con Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, que ayer condenó el ataque a la policía, y Pere Aragonès (ERC), presidente en funciones de la Generalitat, para abordar un vandalismo que deja de momento un balance de 137 detenidos en catorce días.