Duque coloca a su jefa de gabinete al frente de la Fundación Española para la Ciencia
El ministro releva en el cargo a una científica y pone a una periodista y estrecha colaboradora
Pedro Duque ha colocado a su jefa de gabinete, Imma Aguilar, como directora general de la Fundación Española para la Ciencia y Tecnología (Fecyt). Con este movimiento, que se produce en una fundación de carácter público, el ministro de Ciencia e Innovación desplaza del cargo a una científica, Cecilia Cabello, para sustituirla por una periodista y estrecha colaboradora.
Desde hace semanas había rumores en la institución de que algo iba a pasar en las altas esferas y todo se precipitó en la jornada de ayer, Miércoles santo. Aprovechando la batería de ceses y nombramientos de mayor calado que se publicaron en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el ministro Duque incluyó el cese de Aguilar como jefa de gabinete en el boletín. Este movimiento, que pudo pasar desapercibido, era fundamental para poder realizar la operación. Apenas unas horas después, la Fecyt hizo público el anuncio del nuevo destino de la periodista. El momento era idóneo para que no se levantara una polvareda demasiado grande▶ en víspera de vacaciones y camuflando el anuncio entre otros cambios de mayor calado acaecidos en otras instituciones de la Administración.
«El Patronato de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt) ha nombrado a Imma Aguilar Nàcher nueva directora general de la Fundación». A última hora de la mañana y con estas palabras, incluidas en un escueto comunicado, confirmó esta prestigiosa institución científica el nombramiento de su nueva directora general. Además, mejorará su salario▶ pasará de los 91.800 euros que cobraba como directora de gabinete de Duque a los 93.028 por dirigir la Fecyt.
Una operación calculada
Todos estos movimientos, que se concatenaron con precisión durante la jornada de ayer, pusieron de manifiesto que el nombramiento de Aguilar como directora general de la Fecyt no era una operación improvisada, sino perfectamente calculada. No se podía hacer de cualquier manera ni tampoco atropelladamente. Según las normas por las que se rige la Fecyt, Aguilar, que ya era vocal en el patronato en virtud de su antiguo puesto de jefa de gabinete en el ministerio, debía abandonar dichas obligaciones antes de asumir la dirección general del organismo. Y así fue. Si no se hubiera respetado
El ministro Duque, en una charla al inicio de la pandemia ese paso previo, el ministro, de cuyo gabinete depende la fundación, habría tenido un problema que habría trascendido del escenario ético al legal. En apenas unas horas el BOE publicó el cese de la periodista, el patronato
Críticas del PP
«Cambiar a una científica por una periodista muestra la importancia que tiene la ciencia para el ministro»
–que está formado principalmente por altos cargos del ministerio– se reunió y se rubricó sin ningún tipo de problema el cambio orquestado al frente de esta fundación científica.
Pedro Navarro, el portavoz en materia de Ciencia e Innovación del PP en el Congreso, se muestra especialmente crítico con esta maniobra en declaraciones a ABC. «Cambiar a una científica por una periodista demuestra la importancia que le da a la ciencia el ministro de Ciencia», denuncia Navarro. A su vez, el popular también interpreta que colocando a su antigua jefa de gabinete en este puesto, hasta ahora de marcado carácter especializado, el ministro Duque abre un nuevo capítulo en la política de «instrumentalización» de las instituciones y entidades públicas que lleva a cabo el Gobierno. Correos o el Consejo de Transparencia son dos ejemplos.
Giro total
Sorprende que el ministro Duque, astronauta de profesión y el hombre de Ciencia por excelencia dentro del Consejo de Ministros, opte por una profesional de un perfil como el de Aguilar, especializada en comunicación, para dirigir la Fecyt, una institución de clarísimo corte científico. Sobre todo al comparar sus credenciales con las de la anterior directora general.
Mientras que Aguilar siempre ha estado vinculada al periodismo y la comunicación política como asesora, Cabello es licenciada en Ciencias y Tecnologías de los Alimentos por la Universidad de Míchigan (EE.UU.). También tiene un máster en Ciencia, Tecnología y Sociedad por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), como figura en su currículum. Además, se trata de una profesional ‘de la casa’, ya que ha estado vinculada a la Fecyt desde el año 2002 y que apenas llevaba en el cargo seis meses. Fue nombrada directora general el pasado mes de octubre.