La caída al infierno del más fiel paladín del expresidente
El FBI investiga si el diputado estrella Matt Gaetz pagó viajes a una menor por sexo
En los años de Trump, fue su palafrenero, su más ardiente defensor, más trumpista que el propio presidente. En el ocaso, el diputado Matt Gaetz fue todavía más fiel, prometiendo ser la mano ejecutora de la venganza de los republicanos que habían osado votar contra el expresidente en el juicio político del ‘impeachment’. Trump, a quien le agradaba esa entrega, le abrió las puertas de la Casa
Blanca, el avión presidencial y su mansión de Mar-a-Lago, donde el diputado le pidió matrimonio a su pareja en diciembre. Era un cuento de hadas populista, hasta que llegaron acusaciones de trata de menores.
El futuro de Gaetz, que se presumía estrella emergente del ala trumpista de su partido, es hoy en día bastante oscuro. El diputado pelea para defenderse de las múltiples filtraciones a medios norteamericanos sobre una investigación del FBI por relaciones con una menor, pagarle a esta viajes y, en general, ser dado a ofrecer prebendas a mujeres por sexo. Su partido le ha dado la espalda. Pocos son los que han salido a recordar la presunción de inocencia y más los que han admitido a los medios que en los plenos en la Cámara de Representantes solía alardear de las mujeres con las que se había acostado, llegando a enseñar fotos de ellas desnudas.
Gaetz sabía que estaba siendo investigado, y el martes filtró al medio Axios que pensaba salir del Capitolio antes de