Alemania negocia con Rusia la vacuna Sputnik y abre la puerta al resto de Europa
∑Merkel da el paso después de que Baviera y otros länder anunciaran operaciones de compra por su cuenta, pero esperará la luz verde de la EMA
Alemania batió ayer su récord de vacunas, 600.000 en un día. Un total de 11,5 millones de personas han recibido ya la primera dosis, lo que representa el 13,8% de la población, y 4,74 millones la segunda, un 5,7%. Este ritmo de vacunación, sin embargo, es insatisfactorio y no alcanza para lograr los objetivos de inmunidad fijados por el Gobierno alemán, que ha ampliado su estrategia. A la compra conjunta europea de vacunas, muy criticada por su lentitud, ha añadido negociaciones bilaterales con Rusia para comprar directamente la vacuna Sputnik V. De hecho, el ministro alemán lo informó con lealtad a sus homólogos europeos en la reunión del pasado miércoles.
Cuando ayer anunció públicamente el inicio de conversaciones con el grupo farmacéutico ruso, dos de los Bundeländer habían iniciado ya operaciones de compra por su cuenta, Baviera y Meklemburgo Antepomerania, que en conjunto han reservado ya más de 35 millones de dosis. «Expliqué al Consejo de Ministros de Sanidad de la UE que vamos a negociar bilateralmente con Rusia, para saber cuándo y qué cantidades podrían entregarse», dijo ayer el ministro alemán, Jens Spahn, que justificó su decisión explicando que la Comisión Europea había anunciado que no negociaría la compra de la vacuna Sputnik V en nombre de los 27 estados miembros, como había hecho con otras vacunas contra el Covid. Sin embargo, la vacuna no se aplicará hasta que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) lo autorice.
Datos y supervisión
El Gobierno alemán no duda de la seguridad de la vacuna rusa. Spahn subrayó que «Rusia tendrá que proporcionar datos, como los demás productores de vacunas, para su supervisión. Y hasta que esos datos no sean proporcionados no se procederá con la vacuna», explicó. Por ahora, en Alemania se usan las vacunas de Pfizer/BioNTech, Astrazeneca bajo ciertas condiciones y Moderna.
Se espera en breve la distribución europea del laboratorio Johnson & Johnson y la llegada de la vacuna rusa aceleraría considerablemente la campaña de vacunación. «Las entregas rusas deberían tener lugar en los próximos dos o cinco meses, para que la situación actual cambie realmente», defendió, asegurando además que «de una u otra manera tendremos vacunas más que suficientes».
Una decisión meditada
El gobierno alemán ha estado presionando durante meses para que la Comisión Europea negocie una posible compra de esta vacuna con los proveedores rusos, pero el comisario Thierry Breton ha insistido en que esa operación es innecesaria porque la UE ya ha pactado suficientes vacunas de otros fabricantes. La decisión del Gobierno alemán de obtener por su cuenta la vacuna rusa, en todo caso, no es repentina. Putin y Merkel abordaron ya la posibilidad de producirla conjuntamente el pasado mes de enero, en una reunión en la que «se debatió la cooperación en la lucha contra la pandemia, con especial atención a las posibles perspectivas de la producción conjunta de vacunas», reconoció el comunicado del Kremlim. Entonces, Merkel ya adelantó que Alemania no dudaría en utilizar todo los medios a su alcance para luchar contra la pandemia y que actuaría por su cuenta si la Comisión Europea insistía en no comprar la vacuna rusa. «Todo lo que apruebe la EMA será utilizado en Alemania», fueron sus palabras.
Spahn ha explicado a los Bundesländer que «un análisis honesto de la situación muestra que todavía no hay suficientes vacunas en Europa para detener la tercera ola solo con la vacunación», una situación que se ha agravado con la suspensión parcial del uso de la vacuna de AstraZeneca.
Algunos presidentes regionales socialdemócratas, como Malu Dreyer de Renania-Palatinado y Stephan Weil
Producción Baviera no solo comprará la vacuna rusa, también la producirá en su territorio
Desacuerdo
Algunos presidentes regionales alemanes no están de acuerdo con la compra bilateral
de Baja Sajonia, no están de acuerdo con las compras bilaterales, cada uno por su cuenta, pero en año electoral ningún gobierno quiere quedarse en el pelotón de los torpes de la compra de vacunas y Baviera ha logrado tomar delantera, asegurándose además la producción de la vacuna rusa en su territorio.
R-Pharm Germany GmbH, la empresa bávara que ha invertido 20 millones de euros en un laboratorio para la producción de la vacuna rusa, es oficialmente la que ha presentado la solicitud ante la EMA, pero quien está realmente detrás de esta iniciativa es su matriz, R-Pharm, fundada en 2001 por el economista y empresario ruso Alexey Repik, su actual presidente, con excelentes contactos en el Kremlim y una fortuna personal de 2.600 millones de dólares según la revista Forbes. La empresa facturó más
de 1.600 millones de dólares en 2014 y tiene más de 4.500 empleados en 70 sedes de 30 países. Tanto el gerente, Vasily Ignatyev, como el responsable de la filial, Ivan Semenov, son de origen ruso.
Las negociaciones para comprar la vacuna Sputnik se están llevando a cabo con el Fondo Soberano Ruso (RDIF), que financió el desarrollo de la vacuna. R-Pharm es el «socio industrial en la producción» de la Sputnik V, que desarrolló el Centro de investigación Gamaleya de Epidemiología y Microbiología del Ministerio ruso de Sanidad.
500 millones de dosis
La alemana R-Pharm no acredita experiencia anterior en la producción de vacunas. Con algo más de 350 empleados y una facturación de 46 millones de euros en 2018, se especializa «en la producción automática de empaquetado innovador para medicamentos y complementos alimenticios», según su página web. Su objetivo es producir unos 500 millones de dosis al año en cuanto logre funcionar a pleno rendimiento.