Sin distancia de seguridad
nicación del 30 de octubre de Intermezzo, la empresa a la que pertenece el coro titular del coliseo, admitía que habían localizado un caso en el colectivo, pero estaba controlado, al igual que sus contactos estrechos. En ‘Rusalka’ los coristas no salieron al escenario principal, sino que cantaron desde la chácena. En dicho mensaje Intermezzo informaba a sus trabajadores de que se habían detectado «varios casos entre el grupo de trabajo de ‘Rusalka’, que también está controlado». Una fuente cercana al Real eleva a diez los positivos, además del detectado en el Coro Intermezzo. A saber▶ cinco de los diez solistas que participaron en la ópera, dos actores, un miembro del equipo artístico y otros dos casos entre el equipo musical y asistentes. Estos contagios se detectaron entre finales de octubre y principios de noviembre.
Según la estrategia de detección precoz, vigilancia y control de Covid-19 de la Comunidad de Madrid, «a efectos de notificación estatal se considerará brote cualquier agrupación de tres o más casos con infección activa en los que se ha establecido un vínculo epidemiológico». Este es el criterio que siguió la Consejería de Sanidad la semana pasada cuando confirmó que los 24 contagios detectados en marzo, durante los ensayos de ‘Peter Grimes’, correspondían a un brote. Ayer, sin embargo, el director general del Teatro Real restó importancia a esta consideración. García-Belenguer aseguró que en marzo no hubo en ningún momento sensación de riesgo «como para conllevar el cierre del teatro». El responsable del coliseo explicó que desde la apertura de puertas tras el primer confinamiento se han hecho un total de 6.076 pruebas, 4.882 en el Teatro Real –de ellas 2.727 a elencos y artistas– y 1.194 al coro. «Sin duda el Teatro Real ha tenido casos, porque no es un oasis, pero a través del cribado y del rastreo se ha sabido que estaban controlados». Según los cálculos del sindicato CGT, el número de positivos detectados entre los trabajadores del Teatro Real entre el 1 de septiembre y el 15 de marzo asciende a cuarenta▶ cuatro en sastrería, cuatro en caracterización, cuatro en iluminación, tres en mecánica escénica, dos en utilería, dos en maquinaria, uno en regiduría y al menos 18 casos en oficinas y otros servicios. Estas cifras no incluyen al elenco, figuración, coro u orquesta, y no todos se produjeron dentro del Teatro Real, tal y como aclaran las fuentes consultadas. Los responsables del teatro ofrecieron el número de pruebas totales, pero no el número de contagiados; solo los confirmados por Sanidad en el brote de marzo –15 en el Teatro Real y 9 en el Coro Intermezzo– y el positivo detectado en el cribado masivo de la semana pasada. Nada dijeron de la decena de contagios que hubo en ‘Rusalka’.
Teatro abierto
Gregorio Marañón, presidente del Teatro Real, garantizó que están cumpliendo el protocolo «de arriba abajo desde el primer momento». Nadie, añadió, «puede decir seriamente que se ha incumplido». Pese a que solo han informado públicamente de estos contagios cuando ABC desveló una veintena de casos en el mes de marzo, Marañón aseguró que no ha habido intención de ocultar información puesto que la Comunidad de Madrid ha ido recibiendo «al minuto» los resultados de las pruebas laboratorias. «La ópera de Estocolmo va a cerrar sus puertas un mes porque ha descubierto quince contagios. Lo respeto, pero aquí sabemos que se puede aislar inmediatamente a quince personas. Esto [seguir abiertos pese al brote] es mucho más difícil que decir que, como hay infectados, cerramos. También es más costoso económicamente». Marañón subrayó que la institución que él preside está comprometida con la cultura como «valor estratégico».