EE.UU. amplía en 500 soldados sus efectivos en Alemania
Un viejo reencuentro entre amigos, así ha sido la primera visita oficial a Berlín de un miembro de la Administración Biden, el secretario de Defensa Lloyd Austin, que agradeció ayer reiteradamente a Alemania la «fructífera relación que nos une», así como su «prolongado compromiso con la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho». Incluso, en un giro radical del tono en el que se ha desarrollado esta relación bilateral durante los últimos años, Austin recordó el tiempo que durante su juventud pasó en territorio alemán, confesando guardar muy buenos recuerdos▶ «Esta cultura y esta genta siempre han tenido un lugar muy especial en mi corazón», agregó.
Sin embargo, Austin no se limitó a las palabras, sino que pasó a los hechos y comunicó a la ministra alemana de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer (AKK), su anfitriona en Berlín, que EE.UU. desea ampliar con 500 soldados más el contingente de tropas americanas estacionadas en bases alemanas.
EE.UU. revierte así una de las más dolorosas decisiones para Europa de Donald Trump, que en junio de 2020 notificó oficialmente una decisión aireada ya durante meses en la prensa y sobre la que ni siquiera llegó a informar a los socios de la OTAN, su deseo de reducir a 25.000 soldados los aproximadamente 34.500 que Washington mantiene en suelo alemán, además de unos 17.000 empleados civiles de las Fuerzas Armadas norteamericanas. Esto habría supuesto la retirada de 9.000 soldados que, según Washington, estaba negociando con el gobierno de Varsovia que fueran trasladados a bases en Polonia.
Austin aseguró que «la reconstrucción de la relación trasatlántica es un objetivo prioritario que figura muy arriba en mi agenda», prometiendo que «aumentará el trabajo conjunto», a lo que la ministra alemana de Defensa respondió con satisfacción y agradecimiento, sin quedarse en meras palabras.