PP, Cs y Vox desafían a Montero con otra bajada de impuestos
Los partidos acuerdan reducir tributos como el de transmisiones patrimoniales
Mientras el Gobierno central baraja subir impuestos, la Junta de Andalucía quiere seguir la estela de países como Alemania, Italia, Portugal o Francia, que han aprobado rebajas fiscales para capear la pandemia del Covid. Los grupos parlamentarios del PP, Ciudadanos y Vox han llegado a un principio de acuerdo para dar una segunda vuelta de tuerca a la bajada de impuestos aprobada hace dos años, al inicio de la legislatura. Con esta nueva reforma fiscal que están perfilando, los partidos que sostienen el Gobierno regional pretenden incentivar el consumo y aliviar la crisis derivada del Covid19 con la puesta en marcha de ayudas fiscales a las familias y empresas. Se trata de un nuevo balón de oxígeno, que se sumaría al paquete de 732 millones de euros en ayudas directas acordado con la patronal y los sindicatos UGT y CCOO.
Desde el punto de vista político, la reforma representa un claro desafío de la Junta al Gobierno del PSOE y Unidas Podemos. El Ejecutivo de coalición del PP y Cs quiere marcar un perfil propio y diferenciado frente a las recetas de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. La exconsejera de las finanzas andaluzas ha encargado a un comité de expertos una propuesta de reforma fiscal para 2022 que amenazaría con subidas de impuestos de sociedades, patrimonio y sucesiones en las comunidades autonómicas que, como Andalucía, han utilizado su margen de competencias precisamente para reducir la carga fiscal.
PP, Cs y Vox llevaban meses negociando con mucho sigilo una proposición de ley para impulsar la rebaja fiscal que afectaría a los impuestos cedidos por el Estado y que contaría con el aval del Gobierno andaluz y de la Consejería de Hacienda, que dirige Juan Bravo (PP). Según indicaron fuentes populares, uno de los tributos que se estudia rebajar es el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que se abona siempre que se compra una vivienda de segunda mano a otro particular. Este impuesto es diferente según la comunidad autónoma en la que se resida y cada región aplica, además, bonificaciones y reducciones. En Andalucía, con carácter general, se paga un 8% por la compraventa de viviendas de hasta 400.000 euros, pero hay excepciones para rebajar la liquidación a colectivos concretos.
El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, José Antonio Nieto, ha convocado para hoy una rueda de prensa para informar de la proposición de ley. La reforma será objeto de debate y aprobación en el Consejo de Gobierno en los próximos días. En principio, no está previsto que se aborde en la reunión que se celebrará este martes.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno (PP), avanzó ayer en Córdoba que el consejero de Hacienda está negociando con los grupos parlamentarios la reducción de la presión fiscal que iría, fundamentalmente, dirigida a las empresas. Moreno indicó que se trata de una iniciativa en las que llevan «semanas» trabajando y que se presentará en breve. «Queremos hacer de Andalucía una región atractiva para la inversión y por eso estamos haciendo un esfuerzo para bajar los impuestos y reducir las trabas administrativas», anunció en una visita a la fábrica de Pastas Gallo de El Carpio.
Moreno detalló que Andalucía es una de las comunidades que más ha atraído la inversión extranjera en los últimos meses a pesar de la pandemia. «Ha crecido en Andalucía un 64% frente al decrecimiento que ha sufrido en el resto de España. Y ese es el camino que queremos seguir porque somos la tercera comunidad en PIB pero queremos aspirar a más y competir con las regiones más grandes de España».