Ciudadanos mantiene al alcalde investigado por corrupción
Incumple el código ético de Rivera y se ampara en los nuevos estatutos para defender al regidor de Valdemoro
El celo que aplicó Ciudadanos (Cs) en el pasado ante cada presunto caso de corrupción del PP ha pasado a mejor vida. Dos juzgados de Valdemoro han abierto diligencias sobre su alcalde, Sergio Parra, y dos de sus concejales, los tres de Cs, e incluso Parra ha sido ya citado a declarar en calidad de investigado. La Justicia debe dirimir si Parra ha adjudicado a dedo 28 millones de euros, como denuncia su antecesor, el socialista Serafín Faraldos.
El alcalde de Valdemoro, que es además el número 55 en la lista que lidera Edmundo Bal para las elecciones del 4 de mayo, niega haber cometido ninguna irregularidad y acusa a Faraldos de mala gestión y de actuar con «afán de venganza».
De momento, y a la espera de ver cómo avanza el caso en los juzgados, Cs remite a las declaraciones de su alcalde y considera que el asunto no reviste mayor gravedad. Pero sin entrar en el fondo del caso, que corresponde resolver a los tribunales, es cierto que el regidor ya está incumpliendo el código ético aprobado en tiempos de Albert Rivera, muy estricto ante el más mínimo atisbo de corrupción.
El código ético firmado por todos los cargos institucionales y orgánicos de Cs establece el compromiso de dimitir «si fuere investigado, aun sin acusación, en el transcurso de una investigación judicial, tratándose de un delito de corrupción, prevaricación, cohecho, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos y cualquier otro comprendido en el título XIX del Código Penal».
No obstante, en el partido de momento no le exigen que renuncie y se aferran a un cambio en los estatutos, norma máxima del partido, durante la V Asamblea General de Cs en la que Inés Arrimadas fue nombrada líder.
En concreto, el artículo 22 de los vigentes estatutos establece que sea «inelegible» el candidato «que hubiese sido acusado judicialmente por resolución firme que acuerde la apertura de la fase de juicio oral (...) por la comisión de cualquier delito». Las fuentes consultadas por ABC exponen que el cambio fue motivado por un posible perjuicio de la presunción de inocencia que, sin embargo, no obstó en el pasado a reclamar el puesto de dirigentes populares antes de abrirse juicio oral.
Aun así, los estatutos también establecen que los reglamentos antiguos siguen en vigor hasta que no sean sustituidos por otros, por lo que el código ético –aprobado en febrero del 2019 y revisado un año después, meses antes de la V Asamblea General– mantiene su validez. Hecho que provoca una contradicción aparente entre la vocación de los nuevos estatutos y el código ético que firmó Parra en 2019.
Balones fuera de Bal
Bal, preguntado en la Cope por el director de ABC, Julián Quirós, evitó claramente posicionarse▶ «Solo tengo que decir que una vez que se analicen los hechos que se imputan, con las normas internas nuestras, se hará la investigación correspondiente y se tomarán las consecuencias que establecen nuestros estatutos y código ético».
El alcalde, por su parte, emitió un contundente comunicado en el que negó cualquier práctica corrupta. Según él, la empresa FCC está pasando facturas al Ayuntamiento por recogida de basuras y otros servicios sin contrato, pero ya sucedió con el anterior regidor en su etapa final. En abril del 2019 se aprobó una «declaración de servicios esenciales», pero desde marzo del 2019, según Parra, FCC estaba ya operando sin contrato. Por lo que atribuye la querella de Faraldos a «afán de venganza» por dos denuncias que interpuso antes Parra contra él.