Un «sí, quiero» que puede acabar entre los barrotes de una cárcel
Guerra entre los acusados de la «doble boda» de Ronda por tratar de exculparse
El problema de Laura fue que lo quiso todo. La hija del concejal de Ronda tenía que incorporarse a trabajar como enfermera de la UCI del Hospital de la Serranía el 21 de junio de 2017. Pero había concertado su boda para solo unos días antes de que comenzara su contrato. Concretamente, el sábado anterior. Si empezaba a trabajar no se podía ir de luna de miel... y sobre todo no podía cobrarla al no ser aún trabajadora del SAS.
La solución parecía fácil. Quién se iba a dar cuenta. En el expediente, se hizo constar que el enlace había sido el 21. Un miércoles. Así la novia comenzó su contrato con un permiso laboral retribuido. Cobró 1.046,60 euros por esos felices días de vacaciones que tanta desdicha trajeron a raíz de que ABC destapara el escándalo. Hasta el punto de que ahora, la Fiscalía de Málaga, como adelantó ayer este periódico, pide seis años de cárcel para la exalcaldesa socialista de Ronda Teresa Valdenebro, para el padre de la novia y exedil José María Jiménez, y también para la casadera por falsedad documental y estafa.
La pregunta sobre quién modificó las fechas ha abierto una guerra entre los acusados, reflejada en los escritos de defensa. Cada uno trata de salvarse arrojando tierra al otro, en una huida para librarse de la prisión. La gresca entre los Jiménez y la alcaldesa, que ofició la boda de Laura, estalló el día que Valdenebro denunció al exconcejal ante la Fiscalía de Marbella por esta modificación de fechas. La traición hizo que Jiménez arremetiera contra ella con todo.
Purgada por el PSOE
Valdenebro, que fue purgada por su partido, pide su «libre absolución» de los cargos que se le imputan. Esgrime que fue ella quien denunció el caso ante la Fiscalía de Marbella al tener conocimiento. Señala que no sabía que Laura estaba en la bolsa del SAS y que sólo sabía de su trabajo en una clínica de estética. Culpa a José María Jiménez de la modificación, diciendo que tenía poder para ello en el Consistorio.
Además, remarca que las periciales a dos documentos manipulados constatan que su firma fue falseada. Motivo
por el que Fiscalía llegó a pedir el archivo de la causa contra ella, que luego retiró. Valdenebro asegura que firmó un acta con fecha del 17 de junio, que se destruyó para crear otra con la fecha del 21. Señala que, por esta razón, no se dio cuenta de las fechas cambiadas cuando ofició el enlace de los novios.
También culpa a los gestores del hospital comarcal de Ronda de dar el permiso retribuido. Expone que no se cumplió la ley para pedirlo, puesto que Laura no lo solicitó 20 días antes de la fecha y que no era trabajadora del SAS cuando se casó, dejando entrever que se concedieron estas vacaciones pagadas por una especie de conspiración política contra ella.
Un dolor de cabeza
El fiscal ha pedido ahora seis años para la regidora, el edil y su hija por estafa y falsedad documental
El edil culpa a su jefa
Una versión que, como señala la defensa de José María Jiménez y de su hija, olvida las conversaciones entre el concejal y la regidora sobre el asunto, donde se señalan que se demuestra que estaba al tanto de todo. En esos mensajes, el ex concejal acusa a su entonces jefa de ordenarle que gestionara el cambio de fechas, después de que este le contara la complicada decisión que tenía que asumir su hija.
El exedil, que tuvo que dimitir, señala que la alcaldesa mintió sobre cuándo conoció el caso, puesto que dijo que no supo nada hasta el 1 de agosto, aunque sí tuvo conocimiento por las consultas de este diario sobre el caso el 13 de julio.
José María Jiménez sitúa a la exalcaldesa como «inductora» de todo. Llega a decir que es la «principal protagonista» de la historia. El exedil asume su parte de culpa, pero dice que su hija no sabía nada de lo que se estaba cocinando en los despachos del Ayuntamiento. Su defensa pide la libre absolución para Laura Jiménez y una multa para su padre.