El talento os hará libres

El fundador de Mecano entrega a Ayuso su Gran Cruz del Dos de Mayo en agradecimiento a su política cultural

Solo como desagravio por la contraprogramación de la que víctima la pasada Nochevieja, cuando su homenaje a las víctimas del Covid fue ignorado por las emisoras que retransmitían las campanadas –quizá por mentar a deshora la bicha que esconde el sanchismo, llevar al cuello el crucifijo de un capellán del hospital de Ifema o haber sido invitado a Sol por Martínez-Almeida, sepa Dios cuál fue el motivo de aquel apagón tan sectario, infligido al público a costa de un artista– merecía Nacho Cano la Gran Cruz del Dos de Mayo que ayer recogió en la Casa de Correos. Si a Ayuso aún le debemos una, por lo de Iglesias, al fundador de Mecano le debíamos otra, en forma de medalla, recuerdo de una noche de infamia en la que alguien decidió censurar la memoria de los muertos de la pandemia ante una gran bandera de España. Además de valor, hay que tener mucho talento, cierto grado de independencia y un repertorio cuyos derechos permiten vivir de espaldas al mercadillo de las subvenciones para hacer lo que ayer hizo Nacho Cano▶ devolver a Díaz Ayuso –«te la mereces»– la medalla que le acababa de entregar, en reconocimiento a la política de teatros abiertos de la presidenta regional. Frente a quienes se empeñan en patrimonializar la denominada cultura, sesgada por un fanatismo a cobro revertido, Cano reivindica la buena educación. Es casi lo mismo.