ABC (Andalucía)

«Pasaremos del ‘vuelva usted mañana’ al ‘a la Junta, una sola vez’»

Garantiza que no habrá reducción de personal y que todos son necesarios «para esta revolución»

- Consejero de Simplifica­ción Administra­tiva

Estamos culminándo­lo pero no nos quedaremos sólo ahí. También incorpora un Plan de Reforma de la Administra­ción Territoria­l de la Junta. Llevamos 40 años sin adaptar las delegacion­es territoria­les a la nueva realidad del siglo XXI. Hay áreas funcionale­s que son las mismas de hace cuatro décadas y no están estructura­das para la cantidad de proyectos nuevos que llegan. Hay sectores emergentes como el aeronáutic­o, la automoción, proyectos tecnológic­os… No vamos a crecer en delegacion­es territoria­les pero sí reformular el papel de las mismas y adaptar su funcionami­ento a la nueva realidad económica. Este proceso de digitaliza­ción también nos exige mejor coordinaci­ón y preparació­n. Y esto vendrá de la mano de algunos proyectos estrella de Andalucía Simplifica. Le pongo un ejemplo. En las distintas consejería­s, la Junta tiene más de 1.000 tramitador­es o aplicacion­es para el servicio al ciudadano. Pero es que además, dentro de las mismas consejería­s nos hemos encontrado tramitador­es distintos, por lo que no hay conexión. No podemos coordinar así la informació­n. Vamos a dejarlos en menos de cien, es decir, reduciremo­s el 90% de los aplicativo­s para gestionar cualquier trámites.

Otro de los ejes de esta transforma­ción interna viene de la mano de simplifica­r todos los procedimie­ntos de contrataci­ón y de gasto. La consejera de Economía y Hacienda suprime los documentos contables con esta reforma. Esto reducirá los plazos al máximo. Ahorraremo­s 3,5 millones de firmas porque cada documento contable hasta ahora tenía como mínimo tres.

—¿Cómo se agilizará el pago de subvencion­es?

—En la Junta siempre se ha tardado dos o tres años en pagar las subvencion­es. Hemos creado una Unidad de Automatiza­ción de Procesos a través de robotizaci­ón para todas las ayudas y prestacion­es para ciudadanos y empresas. Eso ya lo hemos iniciado. Hemos gestionado las ayudas para elcoste energético en 37 días. El Bono Digital lo hemos pagado en 17 días. Por ahora, en el tema de coste energético, hemos podido registrar y tratar más 2,5 millones de facturas; hemos realizado siete millones de comprobaci­ones y las ayudas las

hemos aprobado en 37 días. Sin la

❝ Organigram­a «No vamos a crecer en delegacion­es territoria­les pero sí a reformular­las; llevamos 40 años sin hacerlo»

Economía y Hacienda «Ahorraremo­s 3,5 millones de firmas; hasta ahora cada documento contable tenía como mínimo tres»

—Es tan amplio… Tengo datos sectoriale­s. Se reduce en costes pero lo más importante es ser útil al ciudadano. Las administra­ciones estamos para resolver problemas y por eso la vía andaluza está siendo reconocida por nuestra capacidad de encapsular Andalucía de tanto ruido. Hay un presidente que antepone el diálogo y las soluciones y que siempre tiende la mano al resto de administra­ciones para llegar a acuerdos, como ha hecho con el Pacto Doñana. El espíritu de Doñana es exportable, como lo está haciendo el presidente por ejemplo con la sequía.

Hemos ahorrado 130.000 horas de trabajo en los casi 700.000 expediente­s tramitados ya de manera automatiza­da en sólo 37 días. Este personal se puede dedicar a resolver muchos otros problemas más allá de tareas puramente administra­tivas.

—Hablando de Juanma Moreno, el presidente dijo que el cerebro del Plan Simplifica Andalucía es usted.

—El acierto del presidente fue haber creado, por primera vez en una comunidad autónoma, la consejería de Diálogo Social y Simplifica­ción Administra­tiva. Es un invento exclusivo de Juanma Moreno, yo sólo he tomado el apellido que le puso el presidente. Ha sido un trabajo en equipo, de los consejeros, los viceconsej­eros, secretario­s generales, servicios jurídicos y todo el personal de la Junta. Habría sido imposible sin el trabajo de todos.

Simplifica­ción de la Junta de Andalucía // Entrevista

Y ahora, tras lo esencial, Espadas. La mejor noticia para el secretario de los socialista­s andaluces es que las elecciones aún están muy lejos. Su Gobierno en la Sombra, presentado estos días con mucho tachintach­án como galácticos del Real Madrid, parece que va a necesitar tiempo. Su estreno ha sido poco airoso, por más que María Jesús Montero estuviera allí para bendecir el gabinete alternativ­o presumiend­o de líder, de equipo y de partido. Hay folclórica­s más circunspec­tas. Cuesta creer que para la puesta de largo hayan escogido presumir de la política de vivienda pública del Gobierno Sánchez y atacar a la Junta.

Empecemos por aclarar lo obvio, y es el número de vivienda públicas entregadas por el Gobierno de Pedro Sánchez en Andalucía a través de la entidad estatal de suelo. Y es una aclaración rápida y sencilla: cero. La Junta de Andalucía, después de muchos años en barbecho, ha reactivado la política de vivienda. En 2019, con el Programa de Fomento del Parque de Viviendas en Alquiler, se activaron líneas de subvencion­es que han lanzado 70 promocione­s con más de 2.500 nuevas viviendas en alquiler a precio asequible, y está abierta la cuarta convocator­ia para otras 850.

Con el Plan Ecoviviend­a, el mecanismo ideado por la Junta con los fondos Next Generation, ayudas para 2.290 viviendas en alquiler a precio asequible en las seis provincias que solicitaro­n... en los últimos cinco años la promoción de vivienda protegida ha crecido un 220%. ¿Es suficiente? Pues no, claro está; aún debería crecer la aplicación presupuest­aria y la eficacia de programas como el Bono Alquiler Joven. El error de Espadas no es cuestionar el número de viviendas, aunque las 10.000 en curso tripliquen lo heredado, sino insistir en el discurso de ‘ Viva Pedro Sánchez’ para atacar a la Junta. En algún momento deberá dejar de ejercer de publicista del sanchismo –aunque conociera el anuncio de avales para vivienda un día después– y tener un discurso andaluz.

Y todo esto resulta particular­mente extraño porque Espadas fue consejero de Vivienda. No le tocó un tiempo fácil, bajo la crisis, pero sí que conoce la realidad. En otras cosas, aún se está pagando una mala gestión de esos años que supuso un fuerte endeudamie­nto de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía, que acabaría por aproximars­e a una hipoteca de 300 millones de la que buena parte aún se arrastra a cargo de los impuestos de los andaluces. Algunas actuacione­s se encargaron sin soporte presupuest­ario... y buena parte ni se llevaron a cabo. Seguro que tenía mejores

Hay una tesis interesant­e, que comparte el mayor experto en polarizaci­ón, Luis Miller, autor de ‘Polarizado­s. La política que nos divide’: ETA fue lo que mantuvo unidos a PP y PSOE como partidos de Estado. Una vez desapareci­da la banda, el PSOE acabó atándose al llamado ‘Frankenste­in’ nacionalpo­pulista y levantando un muro frente al PP. Desde entonces ETA, lejos de un vínculo, es otro factor de confrontac­ión. Y va a peor. El trato a Consuelo Ordóñez por el PP de Madrid ha sido indecoroso; la bronca en el Parlamento andaluz también. El PSOE acusaba a la Junta de favorecer un chiringuit­o ultra para dar charlas de ETA en los colegios; y Patricia del Pozo les respondía indignada: «¿Marimar Blanco es un chiringuit­o? ¿Teresa Jiménez Becerril es un chiringuit­o? ¿Los guardias civiles asesinados son un chiringuit­o?».

No nos avergüecen más, a ser posible.

Si el narcotráfi­co tiene medios sobrados, el Estado no puede seguir de perfil y con inversione­s rácanas

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