La nueva PAC contempla actuaciones que pueden ser muy beneficiosas para luchar contra la escasez de perdices
Lo que beneficia a la perdiz es también bueno para otras muchas especies de todo tipo
do, Luciano y José Luis Santiago, y con Germán Flores, su socio y amigo. Entre todos ellos expusieron de forma esclarecedora las luces y sombras de la nueva Política Agraria Común (PAC) y sus posibles consecuencias con respecto a la perdiz.
Uno de los grandes problemas que tiene hoy este animal es l a industrialización del campo y ese afán por primar la producción. Para Eusebio, en la nueva reforma de la PAC se establecen unos condicionantes tanto de carácter obligatorio como voluntario (estos últimos subvencionados) para ciertas prácticas agronómicas beneficiosas para la fauna, y en concreto para la perdizdiz roja, que pasamos a enumerar en el recuadro adjunto.
Todas las propuestas medio ambientales que plantea la nueva norma no deberían verse incluidas en las justas protestas recientes de los agricultores que, aunque esencialmente van en otra dirección, como la demanda de que los precios de nuestros productos nacionales deban competir en igualdad de condiciones con los de fuera o evitar las intrincadas burocracias del cuaderno digital, muchas veces caen en el mismo saco. Si el agricultor no viera que las ayudas se encuentran estancadas y no percibiera cada vez menos, seguro que adoptaría gustoso estas medidas.
La perdiz roja salvaje es prácticamente un endemismo de la Península Ibérica; es decir, un patrimonio natural incuestionable de nuestra tierra. Si bien sus poblaciones han mermado alarmantemente en muchas zonas, hay cazadores apasionados, como los asistentes a esta reunión, que mantienen, a base de esfuerzo, dinero y privaciones cinegéticas, unos saludables contingentes de perdices en los cotos que gestionan, lo que garantiza su futuro.
Por este motivo, la propuesta ecologista de incluir a esta ave en la lista de especies vulnerables,nerables, lo qque sería la antesalasala de la prohibiciónpro de su caza, además de absurda es imprudente, yya que podría suponerponer que esose esfuerzos de los cazadorescazad dejaran de realizarrealizarse.
En lo personal, sientsiento cierto grado de optioptimismo tras esta reureunión, al menos tentengo más certezas parpara pensar que es posposible recuperar esta j oya de nuestrostros campos, que integrategrar la agricultura en un medio ambientete más ssano es el primer paso, que los cazadores y los agricultoresagricultor podemos hacercer mucho en ese sentido y, lo más difícil, qque si las Administracionesnistraciones llo entienden y lo facilitan lo demás irá rodado. La perdiz es muy agradecida.