La húngara Magyar Vagon presiona a la banca para acelerar la opa sobre Talgo
► Mantiene contactos con las entidades acreedoras, que deben aprobar la operación
La húngara Magyar Vagon (MaVag) tiene prisa por lanzar cuanto antes la opa sobre el 100% de Talgo. Es por ello que, según fuentes conocedoras, ha intensificado los contactos con la banca acreedora de la compañía ferroviaria en las dos últimas semanas para que dé luz verde a la operación, algo necesario para poder formular la oferta.
Más de una decena de entidades financieras son acreedoras de Talgo y tienen incluidas en sus contratos cláusulas frente al cambio de control de la compañía, por las cuales pueden, entre otras cosas, amortizar anticipadamente la deuda que poseen y separarse de la empresa si no están de acuerdo con la opa o ven riesgos en el cambio de dueño de la compañía. Tal como anunció el consorcio Ganz-MaVag Europe Zr en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) hace varias semanas, necesita recabar antes el acuerdo de todas esas entidades, entre las que están Banco Santander, Caixabank, BBVA, Banco Sabadell, Bankinter...
Esa espera para la conformidad es algo que mantiene inquietos a los húngaros, que quieren lanzar la opa cuanto antes, esperando poder hacerlo ya esta semana; lo cierto es que la operación lleva varios meses descontándose pero no ha sido hasta febrero cuando los tiempos se han acelerado. Sin embargo, la pelota no está en el tejado de Magyar Vagon sino en el de los bancos, a los que el consorcio húngaro está presionando extraoficialmente para acelerar en sus análisis.
Es habitual que las entidades financieras acreedoras tengan que dar su aprobación en casos como este pero en este supuesto el cuidado se ha extremado por los riesgos que planean por la estructura societaria y los posibles lazos de los húngaros.
En concreto, los bancos están analizando el origen de los fondos de MaVag, así como su estructura societaria y accionarial, además de las relaciones que existen del consorcio con el Gobierno de Hungría de Viktor Orbán
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parados en el último mes
tualización al avance de la inflación a lo que se suma un 1,2% adicional–, unido al incremento del mecanismo de equidad intergeneracional hasta el 0,7%, proveerán a las arcas de la Seguridad Social cerca de 8.000 millones de euros.
De echo, la subida de cotizaciones prevista quintuplica el aumento de empleo a tiempo completo previsto para este año, que según el Plan Presupuestario trazado por Hacienda y Economía para este año recoge un avance de la ocupación del 1,4%.
Recaudación insuficiente
No obstante, ni la prolija aportación de cotizaciones de empresarios y trabajadores ni la mejora prevista de los salarios en el presente ejercicio servirán para cubrir todo el agujero presupuestario que volverá a dejar la partida presupuestaria destinada a las pensiones, que ascendió a 190.000 millones en el pasado ejercicio y se espera rebase los 200.000 millones en el conjunto del presente año.
Es por ello que el Gobierno también habilitará para el próximo ejercicio la segunda palanca de financiación del sistema, las transferencias procedentes del Presupuesto General que superarán este año los 42.000 millones de euros. Y que según confirman fuentes oficiales será una parte consustancial de las cuentas de la Seguridad Social a futuro para garantizar el equilibrio presupuestario.