Las audiencias de la selección se acercan al récord de Sudáfrica
El partido de España contra Marruecos fue el más visto con 11.560.000 de espectadores
El juego renqueante de la selección española en Rusia, donde ha ganado un partido y empatado dos, no frena el interés de una afición entregada a su equipo. Con Isco al timón en este Mundial, las audiencias ya superan en más de un millón de espectadores a las cosechadas a estas alturas en Brasil, donde ni Vicente del Bosque ni el «santo» Casillas pudieron salvar al equipo de un decepcionante campeonato.
Ni siquiera las malas críticas que acompañan a España en su aventura rusa parecen desmoralizar a los televidentes, cuyo apego continúa incansable en lo que va camino de igualar los datos récord conseguidos hace ocho años en Sudáfrica, el Mundial más visto hasta la fecha. Entonces, algo más de doce millones y medio de personas se reunieron frente al televisor para gritar junto al exseleccionador José Antonio Camacho, que retransmitía el encuentro, cuando Iniesta regaló la primera estrella para la camiseta española.
El último partido de la fase de grupos contra la vecina Marruecos se llevó el pico de máxima audiencia en lo que va de Mundial, atrayendo frente al televisor a 11.560.000 de espectadores, según datos de Barlovento Comunicación.
Muy lejos de estas cifras están las de rivales como Brasil y Argentina, con varias copas del mundo en su palmarés. Han sido precisamente la «canarinha» y la caótica albiceleste, clasificada de carambola en su último partido, las únicas selecciones que se aproximan, en la distancia, a los resultados cosechados por el equipo nacional, con dos partidos –contra Suiza y Nigeria, respectivamente– que rozaron los seis millones de espectadores, casi la mitad de España.
Unas cifras que responden al músculo mostrado por Mediaset España, que por primera vez en la historia de la televisión de nuestro país ofrece en abierto los 64 partidos del Mundial, un evento ante el que sus canales principales, Telecinco y Cuatro, han adaptado sus respectivas parrillas para ofrecer en directo la mayor cobertura posible de todos los encuentros disputados.
Como es lógico, los partidos emitidos en estas dos cadenas hacen sombra a los menos vistos, el Arabia Saudí-Egipto, seguido por 76.000 espectadores, y el Japón-Polonia, con tan solo 3.000 más. Ambos se televisaron en BeMad TV, que con datos mucho más discretos emitió cuatro enfrentamientos con una audiencia media de 99.000 personas, mientras que Energy consiguió 221.000 espectadores con un solo partido, el que enfrentó a la selección mexicana contra Suecia.
No se quedan lejos de los datos más discretos los del decisivo partido entre Irán y la Portugal de Cristiano Ronaldo, última campeona de la Eurocopa, donde los lusos peleaban por arrebatar a España un primer puesto que Iago Aspas le brindó en el último suspiro, con la espuela, al equipo de Fernando Hierro.
El minuto de oro
Ese instante, mientras el VAR decidía si el gol del gallego subía al marcador, alcanzó un pico de 13.978.000 personas, muy cerca del que por el momento es el minuto de oro del Mundial, obtenido en el agónico partido contra Irán, que a las 21.53 h. logró 14 millones de espectadores, como publica Ymedia en su informe especial sobre el campeonato.
De este modo, con una media de 69,1% de cuota de pantalla y 11.148.000 personas frente al televisor, el Mundial de Rusia sigue la estela del de Sudáfrica, con un promedio de 12.660.000 espectadores y una cuota de pantalla del 76%. Lejos queda el de Corea y Japón en 2002, que fue el menos seguido, condicionado por la diferencia de huso horario, según un informe de Barlovento.
La cadena y sobre todo la hora de emisión son un importante condicionante en este campeonato, favoreciendo en este caso el asignado a la selección española, que disputó todos los partidos a las 20.00 horas y en Telecinco, como otros de los encuentros más mediáticos. En total, se han disputado catorce enfrentamientos en el canal principal de Mediaset España con una media del 44,1% de cuota de pantalla y 5.500.000 espectadores, frente a los 23 partidos televisados en Cuatro, que han cerrado la fase de grupos con una media del 21,1% y 2.474 millones de personas frente al televisor.