«Patrick Melrose», el drama de un rico heredero adicto a las drogas
Benedict Cumberbatch vuelve a la TV con una «afilada comedia social» nominada a cinco Emmy
De dar vida al detective inglés más famoso de todos los tiempos a meterse en la piel de un millonario enganchado a sustancias nada recomendables. El polifacético Benedict Cumberbatch vuelve a prodigarse en televisión con «Patrick Melrose», una nueva miniserie de cinco capítulos basada en las novelas de Edward St. Aubyn que llegará a Sky España el próximo 18 de septiembre.
Los libros, semiautobiográficos, siguen la tragedia de un joven marcado por la herencia de un padre muy estricto con quien mantenía una complicada relación y una madre alcohólica de quien heredó una de sus adicciones recurrentes. «Cuando leí las novelas pensé que la historia era muy potente, pero también increíblemente divertida», cuenta David Nicholls, guionista de la adaptación que ya ha conseguido cinco nominaciones a los premios Emmy: mejor miniserie, mejor actor, mejor guión, mejor casting y mejor dirección para Edward Berger («Deutschland 83»).
La ficción, resultado de sintetizar en cinco epiosdios 900 páginas de «diálogos brillantes, decenas de personajes y cuarenta años de una historia familiar complicada», no huye de temas controvertidos como los abusos familiares. «No se me ocurre un padre más monstruoso que David Melrose, y eso ha sido apasionante», puntualiza sobre el personaje interpretado por Hugo Weaving. «Los libros son más ambiguos, pero nosotros hemos tenido que ir un poco más lejos por la naturaleza de la imagen. Aún así, nos hemos acercado de una forma muy responsable a temas muy oscuros. Hemos abordado la decadencia, la enfermedad mental y el suicidio a través del filtro de una comedia social muy afilada», añade el guionista. De hecho, Patrick Melrose exhibe el mismo humor ácido tanto con su selecto círculo social como con sus camellos.
Un largo viaje
La adaptación de «Patrick Melrose» comenzó a tomar forma en la mente del productor Michael Jackson hace cinco años, cuando se hizo con los derechos de la exitosa saga, idónea para ser llevada a la televisión por dos motivos: «abarcaba un periodo de tiempo largo», desde la Francia de los años sesenta hasta la Gran Bretaña de los 2000 pasando por el Nueva York de los años ochenta, y «el centro del conflicto, los abusos a menores, era un tema de actualidad que hasta entonces se había escondido», explica el productor. Hace tres años, Sky se sumó al proyecto, y Benedict Cumberbatch confesó en una entrevista que había dos papeles que le gustaría hacer: Hamlet y Patrick Melrose. Convencerlo fue fácil. «Su actuación es realmente comprometida, valiente, bien documentada y sin miedos», añade.
DURA La serie, que exhibe un humor ácido, se atreve con temas como el abuso a menores