«Había muy buena sintonía entre los grupos»

Con satisfacción recuerdan Rosario Peñalba y Concepción Puente esa primera legislatura en la que ellas fueron las dos únicas mujeres elegidas procuradoras. Ayer, volvieron al mismo Monasterio de Santa Clara emocionadas por revivir aquel momento en el que, reconocen, estaban «muy perdidas» porque «todo era nuevo», pero en el que «la buena sintonía» entre los dos grupos políticos fue la norma «porque empezamos a ver que de verdad íbamos a acercar a la administración a los ciudadanos». El ir de pueblo en pueblo, dando a conocer su labor como procuradoras –y aclarando que no eran de los tribunales– fue su forma de hacer, por eso ahora reconocen con cierto «cabreo» que muchos políticos se centren en la labor de despacho. «Antes vivías para hacer un trabajo para el colectivo, ahora me parece más de ambición personal», lamenta la vallisoletana Rosario Peñalba, quien asume que la política actual está «muy denostada». «El debate político ha cambiado mucho, quizá porque ha cambiado la sociedad», reconoce su compañera, la leonesa Concepción Puente, quien asume con lamento que lo ha hecho «a peor». Ambas en el Grupo Socialista, insisten en que no se sintieron discriminadas por ser mujeres en un hemiciclo con clara mayoría masculina. Hoy, de los 84 procuradores, 35 son féminas.