El «Mata Mua» de Gauguin regresa a España
umata blanca. «Habemus acuerdo». Ya adelantó ayer ABC que sería inminente, aunque con la baronesa nunca se sabe y siempre hay que dejar un resquicio a cualquier sorpresa de última hora.
FPero esta vez no ha habido sorpresa que valga. A la decimo... (hemos perdido la cuenta de las prórrogas del préstamo temporal gratuito al Estado español de la Colección Carmen Thyssen) ha sido la vencida. ABC contaba en exclusiva en la web la esperada noticia pasadas las 18 horas: al fin había un acuerdo para el alquiler de la colección al Estado español por 6,5 millones de euros, durante 15 años. Además, se añade, con opción de compra pasado ese tiempo.
Fue el de ayer un día de infarto: reuniones, llamadas, mails, whatsapps, una nota oficial del Ministerio de Cultura que se resistía a llegar... Pero la noticia estaba en La Moraleja. Y, concretamente, en un almuerzo en casa de la baronesa, al que asistieron el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes; el secretario general de Cultura, Javier García Fernández, y los abogados de Tita, los exministros José María Michavila y Ángel Acebes. Allí se cerraba el acuerdo de alquiler –aunque aún pasarán dos meses antes de la firma oficial, nos aclaran–, brindando con un buen rioja. Nada de champán. La sobremesa se alargó varias horas: el ministro se marchó ya casi anocheciendo.
Un brindis de Tita en homenaje a su marido (este año se conmemora su centenario), que se hizo esperar años y que no pudieron hacer los nueve ministros de Cultura anteriores: Mariano Rajoy, Pilar del Castillo, Carmen Calvo, César Antonio Molina, Ángeles González-Sinde, José Ignacio Wert, Íñigo Méndez de Vigo, Máximo Huerta y José Guirao. Es la misma casa donde cenaba la entonces vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, el día que se subastó en Londres en 2012 «La esclusa» de Constable. Encuentro del que ABC fue testigo telefónico. Si hablaran las paredes de esa casa...
En memoria de Heini
Felicitamos a Tita, pasadas las ocho de la tarde, vía telefónica. «Muchas gracias. Hay acuerdo. Ya está. Ahora tenemos dos meses para firmar el contrato. Lo más importante es que la colección se queda en España y que vuelve el “Mata Mua”». ¿De quién se ha acordado primero? «De Heini, muchísimo. Parte de esta colección era suya y parte la adquirimos juntos». ¿Estaría hoy satisfecho? «Claro que sí». Le preguntamos si Uribes le ha pedido que incluyera en el alquiler «El “Martha McKeen” de Wellfleet», de Hopper, que salió del museo junto a otras dos obras importantes: «El puente de Charing Cross», de Monet, y «Caballos de carreras en un paisaje», un pastel de Degas. «Aquí vuelve el “Mata Mua”, todo lo demás... lo vamos a dejar para después», interviene Ángel Acebes. Pero, según ha podido saber ABC, es cierto, aunque no aparece en la nota de Cultura, que llega a las nueve de la noche. En ella se habla de 400 obras las incluidas en el alquiler. Se supone que son 425, las incluidas hasta ahora en el préstamo, más el «Mata Mua». Y después, se uniría el Hopper. ¿Es cierto que ha vendido ya el Monet y el Degas?, le preguntamos a Tita. «Que no, que no, que no los voy a vender», dice la baronesa con la boca pequeña. José María Michavila se suma a la conversación telefónica y explica que Carmen Thyssen ha renunciado a tres ofertas por el «Mata Mua» desde que se supo que salía de España. Una de ellas, aclara, «en firme, muy consistente, era de 250 millones de euros. La hizo una persona que lo vio en Andorra. No es árabe». ¿Entró, pues, al búnker de Tita, donde lo tiene guardado? «Sí, fue con su asesor artístico. Pero Tita renunció a eso para traer el “Mata Mua” a España. Su deseo es que toda la colección, con un valor de seguro de mil millones, estuviera en España». También cuenta Michavila que hubo una oferta de un país, que no quiere desvelar, para alquilar la colección por 22,5 millones al año.
¿Y se ha solucionado en el acuerdo una antigua reclamación de Tita? Que pueda pasar más días en España de los que le corresponden (tiene su residencia habitual en Andorra), si es para tratar asuntos relacionados con su colección. Explica Michavila que el Gobierno se ha comprometido a que quien tiene que venir a España a cuidar de una colección de esta relevancia (donada, cedida o alquilada a nuestro país), no esté perseguida por Hacienda, no le eche la soga al cuello. ¿Ha participado, pues, Hacienda en la negociación? «Hacienda, a través de la vicepresidenta primera (Carmen Calvo), se ha comprometido claramente a que eso no ocurra».
Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen, valora así el acuerdo: «Es un gran éxito del ministro Uribes y de la vicepresidenta Carmen Calvo, que han logrado al fin lo que tantos gobiernos anteriores habían intentado en vano. Es muy importante que se haya recuperado “Mata Mua” cuando ya casi habíamos perdido la esperanza de que volviera. Para el Museo Nacional Thyssen es fundamental el que se consiga por 15 años una magnífica colección, 426 obras, valorada en más de 1.000 millones de euros. Un espléndida noticia para todo el público de nuestro museo».
Calvo y Hacienda La vicepresidenta se compromete a solucionar con Hacienda los días que Tita puede estar en España